Coosur Betis - Gran Canaria: La necesidad de un revulsivo que alegre el comienzo del año

La coyuntura del Coosur es delicada y no puede permitirse un segundo desliz consecutivo al calor de su público, como el que protagonizó la pasada jornada contra el BAXI Manresa. Fue un duro revés, mayor incluso que el sufrido hace semanas ya contra el Casademont Zaragoza. Otro encuentro muy controlado al final del tercer cuarto que se fue al garete por culpa de la fragilidad del equipo albiverde, demasiado permeable a las turbulencias y ansioso por el cúmulo de derrotas. Le cuesta mantenerse a flote con la mar picada y lo normal, con su nivel y la competitividad existente en la ACB, es que los finales de partidos sean así, inciertos, emocionantes, abiertos, tan dados al suspense y la tensión.

Doce reveses en quince jornadas encienden las alarmas, preocupan, pero no queda otra que levantar la cabeza, rehacerse y buscar soluciones. En los despachos se han movido con la adquisición de Jerome Jordan, el pívot jamaicano al que ya recurriera el entonces Baloncesto Sevilla cuando en la campaña 2015-2016 se vio apurado en la clasificación y obligado a la reconstrucción del juego interior tras la salida del esloveno Slokar. Aquel equipo tenía un margen de dos victorias sobre el descenso cuando aterrizó el jamaicano y el actual se halla con un balance peor y último de la tabla, pero también con más tiempo para rectificar el camino.

Aunque tres triunfos tras quince partidos supongan un bagaje muy pobre, los rivales directos no se han escapado. Quedan a una victoria de distancia, así que el Betis sigue en la brecha. Obviamente, tiene que ganar para mantenerse a tiro de piedra y sus urgencias son mayores. Crece la presión para el Betis y con ella debe lidiar este grupo de jugadores, al menos hasta que respire un poco, empezando por este encuentro contra el Gran Canaria de dos campeones de mundo (Rabaseda y Beirán) y dos exjugadores del otrora Baloncesto Sevilla (Radicevic y Burjanadze) que aterrizaron en los escalafones inferiores cuando el club todavía se denominaba Cajasol. Seguro que este regreso a la capital hispalense no les dejará indiferentes.

Dirigido por Katsikaris, un entrenador de amplio bagaje en la ACB, este Gran Canaria puja por un billete para la Copa del Rey de Málaga, así que no viene de vacaciones a San Pablo. Llega con presión, mas una presión diferente. Necesita seguir sumando para llenar el zurrón. La próxima jornada se la juega con el Baskonia. Suma ocho victorias y ha ganado en pistas tan complicadas como Manresa, Valencia o Bilbao, aunque hace dos semanas sufrió un duro varapalo en el derbi canario (100-79) del que se rehízo la pasada jornada venciendo al San Pablo Burgos (92-89).

Mucho veterano

Los claretianos cuentan con jugadores de gran talento y mucha experiencia. Cook pilota al equipo, Harper y Okoye aseguran anotación exterior, Beirán y Rabaseda dotan al grupo de polivalencia, Burjanadze inyecta garra y carácter, y Shurna asegura mucho trabajo. En el puesto de pívot se está ganando los galones Costello por delante del griego Bourousis. Le sobran kilómetros recorridos al plantel amarillo, otro de esos equipos con todos sus jugadores capaces de anotar triples aunque su gran nivel de acierto (36 por ciento) quede lejos del que aún ostenta el Coosur (40,2). Igual que el choque contra el BAXI Manresa, éste promete ser un partido de muchas aristas y giros de guion, nada fácil para este Betis al que tanto le está costando cerrar los encuentros.

La última derrota evidenció que, al margen de los fichajes, quizá haya que variar roles y jerarquías para optimizar el rendimiento del equipo. Eso es tarea del cuerpo técnico que lidera Curro Segura, quien ha vivido días muy duros. La madre del técnico granadino falleció esta semana y por este motivo se ausentó lógicamente de alguna sesión de entrenamiento.

Volviendo al partido, Oliver puede ser una garantía en los momentos cruciales, a Sipahi se le pide más regularidad, AJ Slaughter cada vez juega más minutos de base y, con la llegada de Jordan, habrá que ver cómo se reorganiza la rotación interior. Malmanis no está jugando desde la salida de Rivers, Nacho Martín no acaba de entrar en el equipo e Izundu ha sido dado de baja en favor de Jordan. El jamaicano se alternará en el puesto de pívot puro con Niang, cuyo rendimiento va en aumento, para que Whittington pase a desempeñarse seguramente como cuatro, sobre todo aprovechando su facilidad para el tiro exterior.