El rapero Sean Kingston y su madre, detenidos por fraude y robo tras una redada en su casa

La mansión del intérprete jamaicano, cerca de la base militar de Fort Irwin, fue asaltada este pasado jueves 23 de mayo por detectives del distrito de Dania Beach, la Unidad de Investigaciones Estratégicas y un equipo SWAT de la policía. Aunque el cantante se encontraba de camino a un espectáculo en Las Vegas en el momento de la redada, las fuerzas de seguridad detuvieron a su progenitora y se llevaron un vehículo lleno de objetos.

En ese momento, los representantes de Sean Kingston, cuyo nombre real es Kisean Paul Anderson, no respondieron ante esta detención. Sí lo hizo el cantante a través de su historia de Instagram, donde quiso abordar este tema ante sus seguidores: «¡A la gente le encanta la energía negativa! ¡Estoy bien y mi madre también! Mis abogados se están encargando de todo mientras hablamos», comentaba entonces.

Horas después, el rapero era detenido sin incidentes a raíz de una orden judicial emitida en Florida, según comunicaba la Oficina del Sheriff del condado de Broward. Kingston, de 34 años, será ingresado en la cárcel de San Bernardino, en California, tal y como ha reconocido el portavoz de las fuerzas de seguridad.

El motivo de esta detención, según ha recogido el portal Page Six, podría estar relacionado con su batalla legal en curso con Ver Ver Entertainment. La compañía demandó al cantante en febrero por impagos relacionados con la venta e instalación de un televisor de 232 pulgadas.

Según recoge esta demanda, Kingston e puso en contacto con la compañía en septiembre para comprar el televisor, que supera los 5,8 metros de largo y cuesta 150.000 dólares, vendido por la marca Colossal TV. El rapero prometió entonces a los propietarios que si aceptaban un pago inicial más bajo, él y Justin Bieber, con el que había trabajado en temas como 'Eenie Meenie', harían promociones y publicidades para ellos, algo que finalmente no sucedió.

De hecho, Kingston ya no tiene una relación laboral con Bieber: «Básicamente tiene un argumento de venta que utiliza para defraudar a la gente. Los induce a que le regalen cosas muy caras, este es un fraude organizado y sistemático», alegó el jueves un abogado de la compañía, Dennis Card, a Local 10 News.