Suscribete a
ABC Premium

¡Qué pena!

¡Qué pena ser católica, creyente, practicante y toledana!. En la tarde del 8 de agosto me acerqué a rezar ante nuestra patrona (20:35) y cuál fue mi sorpresa cuando no me dejaron entrar. ¡Qué vergüenza! y digo ¡qué vergüenza! porque encima como todos sabemos se estaba celebrando el octavario de nuestra Virgen del Sagrario en nuestra catedral. ¡Soy toledana y no puedo pasar! Siento mucha pena y estoy muy indignada: Señores canónigos, señores deanes, señores sacerdotes (no todos), señor arzobispo, no se les llene la boca diciendo que la iglesia somos todos y demuéstrenlo. Voy a seguir siendo católica y creyente, pero: «¿Cómo pretenden llamar a la gente, entre ellos los jóvenes? Les recuerdo que Jesús estaba con todos, especialmente con el pueblo, dando amor. Seguramente entre tanta curia se les ha olvidado.

CONCHI DÍAZ. Toledo

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación