Messi cincela los récords

Se llama Lionel Andrés Messi, nació en Rosario el 24 de junio de 1987 y los aficionados al fútbol se arrodillan ante su magia, como caen genuflexos los rivales. A este loco bajito nunca le cantará Serrat «niño, deja ya de joder con la pelota». Se deleita con sus regates, como disfrutan todos los seguidores azulgrana. Este «pibe», que tuvo problemas de crecimiento, llevó al club catalán hace dos años a la obtención de seis títulos y ahora lo dirige en la consecución de todos los récords de la Liga.

Es demasiado joven para ser considerado el futbolista número uno de todos los tiempos. Necesita consolidar este rendimiento durante varios años más. Y le falta conquistar al menos un Mundial. Pero su calidad le integra ya en la pléyade de los dioses eternos, junto a Pelé, Maradona, Di Stéfano, Cruyff y Puskas.

Anoche, el doble Balón de Oro hizo honor a sus dos galardones universales. Anotó tres goles que otorgaron a su equipo una nueva plusmarca del fútbol nacional: dieciséis victorias consecutivas, una más que las conseguidas por el Real Madrid de Di Stéfano en la Liga 60-61. Tres tantos que catapultaron al suramericano al liderato del Pichichi, con 24, dos más que Cristiano, camino del récord de Hugo Sánchez y de Zarra: 38. Tres dianas que elevaron a 40 su cuenta de aciertos oficiales en la temporada. Mientras remata los hitos de su club, Leo piensa destrozar también su plusmarca personal: los 47 aciertos de la pasada campaña.

El argentino protagonizó un golazo que abrió el cerrojo rojiblanco. Aseguró después el triunfo con un remate que mezcló picardía y habilidad. Y rubricó su actuación con un toque de colocación y fuerza, a la pesca de los balones perdidos. Como sucede con los grandes, erró la ocasión más fácil ante De Gea, por cruzar demasiado el disparo. Era para dejar claro que es humano. Lo dudamos.

El mago de la pelota firmó su cuarto triplete del curso . Le endosó uno al Sevilla en la Supercopa. Repitió ante el Almería en la Liga. Dibujó otro «hat-trick» ante el Betis en la Copa. Y ayer coronó su reinado con otro trío ante el enemigo que más le gusta: el Atlético. Catorce dianas ha sufrido el conjunto madrileño frente al rey del fútbol actual, once en Liga y tres en Copa. Quique manifestó que «es el Di Stéfano del siglo XXI». Un dato define la alcurnia del Barcelona mandado por el argentino: Messi (24), Villa (14) y Pedro (12) suman 50 dianas en Liga, más que el segundo equipo más efectivo, el Real Madrid (48). Está dicho todo.