Soberanismo de proximidad
La efervescencia soberanista se extiende en el ámbito municipal: también el rechazo a la misma

L debate sobre la independencia se extiende al ámbito municipal, donde la defensa del soberanismo se traduce en mociones en favor del derecho a decidir o de la separación de España o, en algunos casos, en actitudes muy mediáticas y de dudosa legalidad. Este curso político ha estado protagonizado por el desacato de numerosos ayuntamientos a la ley de banderas , que obliga a colocar la enseña española en un lugar visible de la fachada municipal. Vic (Barcelona) mantiene exhibe la bandera independentista («estelada»). Su alcalde, Josep Maria Vila d’Abadal, preside la Asociación de Municipios por la Independencia (AMC), a la que están suscritos 670 municipios. Algunas de estas localidades, como es el caso de Vic y Begues (Barcelona), pagan su cuota con fondos municipales, como ha denunciado la Delegación del Gobierno en Cataluña, muy activa el control de estas ilegalidades.
Otros alcaldes han recurrido a la provocación . Jordi Fornas, ex alcalde de Gallifa (Bacelona) colocó una minibandera española en la fachada, mientras que la alcaldesa de La Garriga (Barcelona), Meritxell Budó i Pla (CiU), coloca la enseña nacional solo 30 segundos para hacerle una foto y enviarla a la Delegación del Gobierno. Más ofensiva fue la reciente quema de una bandera española en las fiestas de Mataró (Barcelona) por parte de unos jóvenes, mientras el alcalde, Joan Mora, CiU, jaleaban «independencia». Otra forma de erradicar cualquier tipo de reminiscencia española es cambiar el nomenclator , como ha hecho el Ayuntamiento de Sitges (Barcelona), al sustituir el nombre de la plaza España, lo que ha provocado la ruptura de CiU y PP, que mantenían hasta ahora un pacto municipal. La Seu d’Urgell (Lérida) también hizo algo similar, mientras que en Calella (Barcelona) o El Perelló (Tarragona) es la plaza de la Constitución la que ha sido renombrada.
El último en sumarse a ese ocultamiento de la Carta Magna ha sido el alcalde de Barcelona, XavierTrias, que ha retirado una placa que llevaba 175 años en la fachada consistorial. En la Ciudad Condal se ha dedicado una plaza al creador de la «estelada». Asimismo, localidades como Tortosa (Tarragona), Gerona o Puigcerdà (Lérida)se han declarado territorio catalán libre y soberano».
Por contra, en otros municipios se han evitado mociones contra el derecho a decidir, como es el caso de Castelldefels y Badalona (Barcelona), gobernados por el PP, mientras que en L’Hospitalet de Llobregat (Barcelona), su alcaldesa, Núria Marín (PSC), ya hace campaña por el «no» a la independencia.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete