Munar comparece ante el juez pero se acoge a su derecho a no declarar
La expresidenta del Consejo de Mallorca, que ha salido por primera vez de la cárcel desde julio pasado, debía responder acerca de un presunto soborno de cuatro millones de euros recibidos por exdirigentes de UM
JOSEP MARIA AGUILÓ
La expresidenta del Consejo de Mallorca y de Unió Mallorquina (UM), Maria Antònia Munar, ha salido este viernes de la cárcel por primera vez desde su ingreso en prisión el pasado 24 de julio, para declarar por presunto cohecho, en calidad de imputada, en una ... pieza separada del «caso Can Domenge». Sin embargo, se ha acogido ante el magistrado a su derecho a no declarar. Munar ha llegado al Juzgado de Instrucción número 9 de Palma poco antes de las diez, a bordo de un vehículo policial, sin esposar, muy delgada y visiblemente desmejorada. El abogado de la expolítica nacionalista había solicitado ayer al juez que su cliente pudiera declarar desde la cárcel a través del sistema de videoconferencia, pero el magistrado rechazó esta posibilidad.
En el «caso Can Domenge» se investigaba originariamente la presunta venta irregular, mediante información privilegiada, de los terrenos del mismo nombre por parte del Consejo de Mallorca a Sacresa. Con posterioridad, se abrió una pieza separada para indagar acerca de un supuesto soborno de cuatro millones de euros, que habrían sido entregados por la citada empresa a dirigentes de UM y también al propio partido poco antes de que concluyera el proceso de enajenación del solar.
Precisamente, el exvicepresidente del Consejo de Mallorca, Miquel Nadal, y el exconsejero de Territorio, Bartomeu Vicens, ratificaron ayer ante el juez esta versión. Cabe recordar que a lo largo del juicio por el «caso Can Domenge», celebrado en julio del pasado año, Vicens afirmó que se habría pactado con Sacresa la entrega de un soborno de cuatro millones. El propietario de la empresa, Román Sanahuja, reconoció entonces ante el juez el citado pago. De esa cantidad, tanto Munar, como Nadal, una tercera persona y el propio Vicens habrían recibido 450.000 euros, mientras que dos millones de euros habrían llegado a UM. Los 200.000 euros restantes habrían sido para un empresario.
En su declaración de ayer, Vicens corroboró ante el juez lo que ya expuso hace medio año. Al mismo tiempo, desveló el nombre de la tercera persona que habría recibido también 450.000 euros. Se trataría de quien fue el intermediario en la entrega del dinero, Miquel Llinàs, un antiguo militante de UM que este viernes ha declarado igualmente ante el juez.
Llinàs ha reconocido, como ya hizo con anterioridad ante la Policía, que hizo de intermediario en dos ocasiones. En la primera, recogió un sobre de un bar, mientras que en la segunda recogió dos sobres de un hotel. Esos sobres con dinero fueron entregados a Vicens, que fue quien le había pedido previamente que fuese a recogerlos. Llinàs ha negado, en cambio, haber recibido 450.000 euros por ese trabajo. Según su testimonio, sólo habría recibido 35.000 euros de Vicens.
Por su parte, Nadal indicó ayer que el dinero que él recibió lo destinó a la precampaña electoral de 2007, en la que era el candidato de UM a la Alcaldía de Palma. Nadal negó, sin embargo, haber sido la persona que exigió a Sacresa cuatro millones. Aun así, reconoció que intuía que en cada concurso público se pagaba un soborno.
En los citados comicios, la formación nacionalista obtuvo dos ediles en la capital balear, al igual que la coalición econacionalista BLOC, que dieron su voto a la socialista Aina Calvo para que fuera investida alcaldesa. El PP había sido la formación más votada entonces, con 14 ediles sobre un total de 29, tres más que el PSOE, pero gracias al citado apoyo Calvo desbancó a la popular Catalina Cirer al frente del consistorio palmesano.
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