El PP pide hasta 5 años de cárcel para los miembros de IU que les insultaron en una web
La página electrónica «noalaguerra.com» tachaba a José María Aznar de «asesino» y a todos los diputados del PP de «cómplices de asesinato» por la guerra de Irak
MADRID. El PP ha solicitado una pena de entre tres meses y cinco años de prisión para los dos acusados, ambos militantes de IU, en la querella por supuestos delitos de calumnias e injurias dirigidas contra miembros del Gobierno y diputados en una web en la que se les calificaba de «asesinos» y «cómplices de asesinato» por el apoyo de España a la guerra contra Irak. Juan Carlos Monedero, uno de los imputados, atribuyó esta querella a una «caza de brujas» y a un intento de criminalizar a Izquierda Unida.
La petición de esta pena de prisión consta en la calificación provisional de los hechos de la acusación. También solicita al titular del Juzgado de Instrucción número 17 de Madrid que ordene a las fuerzas de seguridad que investiguen la web «noalaguerra. com», en la que se calificó de «asesinos» a miembros del Gobierno y del PP, así como una serie de sitios bajo la denominación «nodo50».
Estas investigaciones servirían, según la acusación, para delimitar el uso de Internet, consentido por responsables de las páginas o a través de la acción de piratas informáticos, destinadas a promover una campaña de amenazas contra dirigentes del PP. También se incluían en estas páginas, añade, datos de las agendas políticas de los populares, para que se boicotearan sus actos, informa Ep.
Las peticiones del PP fueron conocidas después de que los dos imputados declararan por espacio de dos horas. Se trata de Juan Carlos Monedero, profesor de Ciencias Políticas de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociología de la Universidad Complutense de Madrid, y de Miguel Martín, ex administrativo de IU. Ambos son militantes de la formación de izquierdas.
«Acallar voces críticas»
En su declaración, Monedero no facilitó datos de los alumnos que pidieron elaborar la página web, a los que financió con 50 euros «con el propósito de informar sobre la guerra de Irak», y negó ostentar cargo alguno en la coalición liderada por Gaspar Llamazares, aunque sí reconoció ser militante de la misma. Las imputaciones, dijo después en declaraciones a la prensa, son «una caza de brujas» y «un intento de acallar las voces críticas surgidas en la Universidad».
«En un momento dado, el Gobierno entendió que el problema no era que cayeran bombas sobre Irak, sino que la ciudadanía española se había posicionado en contra de la guerra, y ante esto el Ejecutivo decidió contraatacar», explicó, ante lo que el Partido Popular consideró oportuno querellarse. «Busca criminalizar a IU, así como a toda la oposición», sentenció.
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