«El cambio de hora debe ir acompañado de nuevos hábitos»

Ignacio Buqueras, presidente de la Comisión Nacional para la Racionalización de los Horarios Españoles (Arhoe) , lleva más de diez años de incansable lucha por lograr un mejor uso del tiempo, fundamentalmente para alcanzar una mayor conciliación de la vida laboral, personal y familiar.

—¿Qué supone la propuesta que mañana se votará en el Congreso?

—Una gran satisfacción porque está muy en consonancia con las peticiones que realizamos desde Arhoe. Es un primer paso. Muy importante, sin lugar a dudas. Permite que nuestro reloj biológico personal esté de acuerdo con el horario solar.

—Pero, ¿basta con cambiar una hora para conciliar mejor?

—No, no es suficiente. Esta medida debe ir acompañada de un cambio de hábitos como, por ejemplo, que se dejen de emitir programas televisivos de «prime time» después de las once de la noche, entre otras muchas medidas.

También se debe seguir el ejemplo de muchas empresas —algunas del Ibex— que han hecho esfuerzos por rentabilizar el tiempo —se supone que la gente ya ha desayunado en casa y se eliminan los 30 a 40 minutos del café en la oficina, las dos o tres horas de la comida pasan a ser 30 o 45 minutos, se pauta una hora de comienzo y final de las reuniones para hacerlas más productivas...— y los empleados salen antes con lo que tienen mayores posibilidad para atender a sus hijos, sus mayores, o sus asuntos personales. El efecto motivador que produce en los empleados ha demostrado que aumenta la productividad en las organizaciones que apuestan por este cambio de hábitos.

Basta recordar también el ejemplo del Ayuntamiento de Madrid, que a las cinco de la tarde todos terminan su jornada, con el pertinente ahorro de coste energético, entre otros.

—La Subcomisión propone también que los escolares empiecen un poco más tarde las clases y tengan jornada partida. ¿Cree que es efectivo?

—Debe existir una mayor coordinación entre colegios y empresas, de otra manera no se logrará, entre otros asuntos, que los padres cuiden por la tarde de sus hijos y eviten que estén solos en casa, con los peligros que ello supone: que se lancen a la nevera y agraven el problema de obesidad, que se tumben a ver la tele y fracasen en los estudios, que caigan en una adicción a las redes sociales...

—¿Cree que se aprobará mañana?

—Considero que sí porque hay una sensibilización social suficiente. La decisión está ahora en manos del Gobierno y le reiteramos una vez más que una de las grandes reformas pendientes es la de los horarios porque afecta muy directamente a todas las personas y familias de este país.