Comienza el «show Bárcenas»

Al igual que hizo la noche que salió en libertad provisional volvió a reconocer la existencia de una caja B, que se creó cuando Rosendo Naseiro era tesorero del Partido Popular. La primera anotación de esas hojas manuscritas se remonta a abril de 1990, justo el año y el mes que salta el caso Naseiro. A pesar de que Bárcenas ha apuntado en más ocasiones a su antiguo jefe, no está imputado por el juez de instrucción Pablo Ruz en la causa. Pero sí exculpa al presidente de honor del Partido Popular —«no tengo conocimiento de que Aznar conociera esa contabilidad»—.

Antes de salir de su domicilio, ABC mantiene una conversación por teléfono con Luis Bárcenas que asegura estar «volviendo a la realidad y recuperando el tiempo perdido». «El que rompe la baraja es el Partido Popular. Se olvida que no soy yo el que filtra los papeles secretos a un periódico. Durante esos primeros momentos defiendo al PP, llego a falsificar mi letra para que no se parezca a las anotaciones, me vuelco en defender al partido». Entonces, ¿por qué decide cambiar de versión? « Por la torpeza del PP . No es una cuestión de piel, sino de falta de cerebro. Si en mis declaraciones en la Fiscalía Anticorrupción defiendo al partido, ¿por qué envía María Dolores de Cospedal a los suyos para criticarme y lanzar acusaciones sobre el dinero en Suiza?».

Durante su estancia en Soto del Real, Bárcenas no sólo se ha dedicado a escribir sus reflexiones en cuadernos, sino que también ha realizado anotaciones en todos los informes emitidos por la UDEF, la Agencia Tributaria y los distintos autos del juez Ruz. Otra de sus aficiones ha sido la lectura, llegando a leer 187 libros. Da una muestra de que se lo ha tomado con calma, aunque no olvida que hasta hace un día era un preso preventivo. Por eso le da la «máxima importancia» a la entrevista en exclusiva publicada en ABC el viernes 16 de enero , según el hombre de las finanzas del PP, «ha podido salir del agujero en el que estaba».

En su primera noche en libertad, estuvo relajado hasta bien tarde hablando con los suyos, degustando tres botellas de vino, un lujo prohibido hasta hace bien poco. Después de estar casi un año y medio silenciado para los medios, se embriagó para su primer día en libertad. Y en cierta forma, parece que ese tiempo perdido es lo que pretendió recuperar, aumentando los decibelios de sus declaraciones en las cuatro paradas realizadas desde el mediodía.

Bárcenas tiene hasta el miércoles de la semana que viene para elegir nuevo abogado. Antes de esa decisión, tendrá que pasar de nuevo a firmar por la Audiencia, marcando de nuevo los tiempos y con una amenaza velada. «Estoy en excedencia forzosa. Estoy meditando sobre esta cuestión y probablemente pida mi reincorporación al PP».