El lenguaje no verbal revela una gran implicación personal de Rajoy en su balance de 2014

Es una de las conclusiones a las que ha llegado José Luis Martín Ovejero, abogado y experto en Comunicación No Verbal , en el análisis de la comparecencia. Para el especialista, llama la atención el cambio de la primera persona del plural a la primera del singular durante la comparecencia.

«En cuanto a las decisiones adoptadas por el Consejo de Ministros utiliza siempre la primera persona del plural, lo correcto al tratarse de iniciativas colegiadas», dice Ovejero. «Esto cambia para utilizar la primera persona del singular más adelante, detalle interesante pues conlleva una mayor implicación personal en aquellas acciones que menciona».

Ovejero pone varias frases de la comparecencia como ejemplo. «Les pronostiqué un 2014 mucho mejor y esa previsión se ha cumplido»; «estoy convencido que los datos correspondientes al mes de diciembre… van a conformar esta tendencia»; «por lo que se refiere a Cataluña, lamento que algunos hayan abandonado lo que debe ser la prioridad de cualquier gobernante: solucionar problemas en vez de crearlos». En este último caso, dice el experto, se suma una implicación emocional de Rajoy tras remarcar la expresión «lamento». De hecho, el presidente efectúa a lo largo de todo su discurso golpes de voz en palabras a las que personalmente quiere dar énfasis.

Durante la primera parte de la comparecencia, el tono de voz, el uso de la primera persona del singular y algunos gestos ilustradores son las principales señas para una lectura de la comunicación no verbal. Al ser una comparecencia leída, pierde espontaneidad y los matices emocionales que mejor le podrían delatar a través, principalmente de su expresividad facial, se observan difícilmente. «La gestualidad es mínima también por lo que el poder de convicción se reduce», dice el experto.

Otro de los puntos que más le llama la atención a Ovejero es en el que Rajoy asegura que «en apenas tres años los españoles han conseguido dar la vuelta a la situación». Según el especialista, en esa frase Rajoy «no se refiere a sí mismo ni al Gobierno como autor del cambio, sino al conjunto de los españoles, un buen detalle de cara los ciudadanos».

Pero cuando finaliza la primera parte de la comparecencia y se abre el formato pregunta-respuesta entre periodistas y presidente, Rajoy gana en gestualidad y espontaneidad. Es en esta parte donde Ovejero nota la implicación del presidente en asuntos como la estabilidad política y la unidad de España.

Por último, el experto vuelve a hacer referencia a la utilización de la primera persona, muy convincente por conllevar un elevado grado de implicación personal. «YO no he hecho ningún balance triunfalista, he hecho un balance realista»; «YO creo que año que viene, YO creo no, afirmo, que el año que viene vamos a crecer más que este año» o «YO en principio no tengo ninguna intención de adelantar las elecciones», son otros ejemplos de las frases de Rajoy.

No obstante, en este último caso, según Ovejero «la utilización de la expresión «en principio» (lo cual en los casos anteriores no hacía) introduce incertidumbre sobre el futuro en el próximo año sobre si se verá obligado a adelantar elecciones».