El Rey, listo para su próximo viaje a Roma tras una gira por el Golfo

El jefe de la Casa explicó que los ministros que han acompañado al Monarca en el viaje —los de Exteriores, Defensa, Fomento e Industria— «han tenido una serie de encuentros que hubieran sido imposibles sin la presencia del Rey». El alto cargo de Zarzuela destacó «el esfuerzo por venir» que ha hecho Don Juan Carlos, aunque aseguró que «está perfectamente de salud» y mencionó que el martes por la noche, tras la cena que le ofreció el Emir de Kuwait, «estuvo tomando café y charlando durante más de una hora con los ministros, animado y muy bien». Preparado para los próximos viajes: primero a Roma, a la canonización de los Papas, y después otra vez al Golfo Pérsico, a donde regresará dentro de quince días, para visitar Omán y Bahrein. Mas adelante irá a Arabia Saudí y posteriormente a Qatar.

Spottorno precisó que, en sus reuniones con quienes han sido sus anfitriones, «no sólo se ha interesado por las relaciones bilaterales, sino también por el futuro de estos países, por conocer hacia dónde caminan». Y es que a estos emiratos petroleros les preocupa cómo asegurarse la prosperidad en el futuro, cuando se agote el recurso natural que les ha hecho ricos. Por ello, ahora quieren diversificar sus inversiones.

Don Juan Carlos emprendió regreso hacia Valencia, para asistir a la entrega de la Copa del Rey de fútbol, después de presidir en Kuwait un encuentro empresarial con hombres de negocio de los dos países. En dicho acto, insistió en la solidez de la economía española: «España ha vivido durante los últimos años una fase de crisis económica que ha venido superándose gracias al esfuerzo de todos los españoles. Pero ahora, tanto la inversión local como la extranjera confían plenamente en la solidez y el futuro de nuestra economía», afirmó.

Un día después de que las autoridades kuwaitíes le transmitieran su deseo de aumentar sus inversiones en nuestro país, el Monarca les invitó a dar ese paso: «Animo a las empresas de Kuwait a que aprovechen las oportunidades que ofrece nuestro país en esta nueva etapa», expresó.

Pero también respaldó a las empresas españolas que aspiran a conseguir contratos en los proyectos de modernización de este emirato, y dijo de ellas que «en las últimas décadas han demostrado en todo el mundo y también en Kuwait su calidad y buen hacer».

El Rey correspondió a las numerosas muestras de afecto recibidas con otras palabras de aprecio: « Los españoles tenemos una gran estima por los pueblos árabes. Sentimos como propios sus problemas y también, como en el caso de Kuwait, nos alegramos verdaderamente de sus éxitos». En el terreno político, destacó que sea el Emir de Kuwait quien presida este año la Liga de Estados Árabes y el Consejo de Cooperación del Golfo. El Emir «podrá hacer valer la moderación y la responsabilidad que caracterizan a Kuwait», dijo el Rey, y «de este modo, contribuirá, junto a los socios de la UE, los países amigos del mundo árabe y todas las naciones amantes de la concordia, a la paz y la estabilidad en esta región y en todo el mundo».