Magdalena Álvarez no logra sacudirse la imputación

Alaya contestó este jueves a la petición de la Audiencia de Sevilla para que motivase la imputación de la socialista con un contundente auto en el que explica su imputación y recuerda a Álvarez su «ilícita intervención en los hechos y los pasos que dió en connivencia con otros para instaurar el ilegítimo sistema de transferencias de financiación para la concesión de subvenciones sociolaborales».

El auto de Alaya —en el que pide «calma» para poder culminar con «dignidad» el caso que empezaron a instruir en 2011 «unos pocos incansables»— llega una semana después de que la Audiencia de Sevilla revocara parcialmente la imputación de la exconsejera. La juez vuelve a acusarla de malversación y prevaricación, «a fin de colmar la exigencia de sus derecho de defensa por si quisiera ampliar algún extremo de su declaración».

Aunque vuelve a estar imputada, la exministra de Fomento no renuncia a su jugoso cargo en el Banco Europeo de Inversiones (BEI), al que llegó en julio de 2010 y del que percibe un salario que ronda los 22.000 euros mensuales como vicepresidenta del Comité de Gestión del BEI para España y Portugal. Magdalena Álvarez podría permanecer en ese cargo hasta 2.022, doce años completos.