El PSOE da el «salto federal» para salvar su relación con el PSC

Ya solo queda resolver el «protocolo» de relaciones entre ambos partidos, pero sobre eso todavía no hay acuerdo , como demostró que mientras Rubalcaba se resistía a confirmar su ratificación en el Comité Federal del 13 de julio, el primer secretario de los socialistas catalanes, Pere Navarro , lo dio por hecho.

Y es que quedan asuntos como la libertad de voto de los 14 diputados del PSC en el Congreso, que muchos barones siguen sin aceptar, por más que reconozcan que el «granero» socialista catalán es clave para volver al poder.

De momento, el Consejo Territorial aprobó ayer la «Declaración de Granada» sin sobresaltos ni malos gestos entre Navarro y el resto de barones, porque se llegó a ella tras meses de arduas negociaciones bilaterales en las que el propio Rubalcaba se ha implicado personalmente.

El problema es que un texto que Navarro definió como «punto de salida» , para el resto de los barones es el máximo al que pueden llegar. De hecho, el documento que acompaña a la declaración, una veintena páginas, es un compendio de principios sin excesiva concreción, precisamente para ser ratificado por unanimidad.

En el camino, el PSC renuncia a incluir el «derecho a decidir» de los catalanes , pero a cambio logra una mayor descentralización de la Justicia, un Senado convertido en Cámara territorial ( elegida por gobiernos, parlamentos o ciudadanos ) y, sobre todo, la inclusión del principio de «ordinalidad» , esto es, que ninguna comunidad donante en solidaridad (la vieja reivindicación catalana) quede por debajo de otra receptora.

Eso sí, el extremeño Guillermo Fernández Vara , el castellano-manchego, Emiliano García-Page , el valenciano Ximo Puig o el madrileño Tomás Gómez , lograron finalmente la estrella del testo: un Fondo de Garantía del Estado de Bienesta r que, según explicó Rubalcaba, sería en nuevo artículo 135 bis de la Constitución, expresamente dedicado a garantizar que Educación, Sanidad y demás servicios sociales sean iguales en toda España. Se subsumirían en ese fondo el actual Fondo de Compensación Interterritorial, el de nivelación de servicios y otros, y todo ello quedaría fuera, en lo sucesivo, de la negociación quinquenal del sistema de financiación autonómico. Finalmente y tras la dura polémica de semanas atrás con Pere Navarro, que llegó a pedir la supresión del «privilegio» del concierto en País vasco y Navarra, el texto no habla más que de «perfeccionarlo» para que no sufra la solidaridad.

Hasta tal punto se ha embarcado en PSOE en un giro federal que su secretario general llegó a decir, en su oferta a Mariano para pactar la reforma del título VIII de la Constitución, que es «el único punto de encuentro posible» para la «actualización urgente» del Estado de las Autonomías de 1978.