La reforma local, pendiente del informe del Consejo de Estado para su aprobación

La reforma de la Administración Local, cuyo informe fue aprobado por el Consejo de Ministros del pasado 15 de febrero, está pendiente del informe del Consejo de Estado, que podría darse a conocer en los próximos días. Este documento es vital para el Gobierno, ya que le puede indicar el camino para realizar algunos cambios en el proyecto inicial, como así le ha pedido la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) y muchos alcaldes del Partido Popular.

Una vez que cuente con este informe, el Gobierno tendrá que aprobarlo otra vez en Consejo de Ministros y enviarlo al Congreso y al Senado para su tramitación parlamentaria.

Después de varios aplazamientos en su primera aprobación en el Consejo de Ministros y de hasta diez borradores, el texto no satisface a los afectados, que incluso amenazan con presentar un documento de alegaciones «muy duro» con el proyecto del Ejecutivo de Mariano Rajoy.

La reforma local reduce el número de concejales con dedicación exclusiva y el de asesores que podrán tener los ayuntamientos, además de fijar los sueldos máximos de los alcaldes según el tamaño del municipio -en ningún caso más de los 100.000 euros de un secretario de Estado- y de los funcionarios municipales para evitar las diferencias salariales que existen actualmente entre localidades.

El Gobierno pretende ahorrar 7.129 millones de euros netos entre 2013 y 2015 con estas medidas, entre otras, como la reorganización de las competencias o la eliminación de las mancomunidades que no informen sobre sus gastos.

De los 68.285 concejales que existen en España solo cobrarán a partir de la aprobación de la ley el 18 por ciento, es decir, 12.188. El resto, el 82 no tendrá sueldo.

El Ejecutivo ha retirado algunas competencias de Educación. Sanidad y Servicios Sociales a los ayuntamientos, traspasándolas a las Autonomías, pero deberán ser financiadas por los entes municipales. Este punto es uno de los que ha provocado más críticas, y el que podría ser revisado.