Hollande defiende el tope de inmigrantes y el veto al velo para no perder a la extrema derecha

En su estrategia para atraer a votantes de todo el espectro electoral, el socialista François Hollande, favorito en los sondeos para la segunda vuelta de las presidenciales del próximo 6 de mayo, ha «comprado» este viernes la propuesta del candidato conservador y actual presidente, Nicolas Sarkozy, de limitar la entrada de inmigrantes extranjeros cada año.

Hollande habría decidido endurecer su discurso para captar apoyos entre el electorado de extrema derecha: «En tiempos de crisis, es necesario limitar la inmigración económica, es indispensable», ha dicho el socialista en una entrevista en la emisora de radio RTL M.

« Cada año el Parlamento establecerá la cifra según las necesidades » de la economía francesa, ha indicado, añadiendo que «no es normal que un cierto número de empresarios, de manera cínica, utilicen mano de obra clandestina». Hollande ya había afirmado el jueves por la noche en France 2 que los extranjeros en situación irregular «serán llevados a la frontera», sin mencionar su compromiso de examinar posibles regularizaciones «caso por caso» , según criterios objetivos.

En otro guiño a los votantes de la ultraderechista Marine Le Pen, el candidato socialista ha asegurado que «mantendrá» la ley que veta el uso del velo en lugares públicos. La norma fue aprobada hace un año y en la votación la izquierda decidió abstenerse.

Desde su derrota del domingo en la primera vuelta, Nicolas Sarkozy ha mantenido su advertencia sobre los planes de Hollande de regularizar la situación de los inmigrantes «sin papeles». En cada mitin, el candidato-presidente recuerda que el socialista pretende dar el derecho a voto en las elecciones locales a los extranjeros residentes en el país desde hace más de cinco años.