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Día 02/11/2011
«Hay momentos en los que a uno le gustaría dedicarse a otro oficio, y este es uno de ellos». Así concluía su artículo de esta semana Ángel Laborda, uno de los economistas-coyunturalistas más avezados y recomendables. Y tiempo atrás Máximo ilustraba uno de sus dibujos con un concluyente bocadillo: «Así que usted es economista… ¿no le da vergüenza?». No son buenos tiempos para los economistas. Sin embargo, les recomiendo encarecidamente que dediquen unas horas a un librito reciente (octubre 2011, Destino-Fedea, 240 páginas, 18,5 euros) firmado por Jorge Juan, seudónimo de seis economistas con fundamento, que han titulado «Nada es gratis», encabezamiento de un blog que estos y otros economistas mantienen desde hace tiempo y cuyo seguimiento les encarezco.
Para España las elecciones del 20-N traen la oportunidad de otro reparto de cargos y cargas. Tras la «belle époque» (1995-2008) y el trienio desperdiciado (2009-11) toca ahora pagar facturas, asumir costes y recomponer, reparar y volver al buen camino.
Los de Jorge Juan describen con claridad, contundencia y abundancia de datos y argumentos el origen y la matriz de nuestra crisis, los problemas acumulados (y algunos pendientes) y las opciones disponibles para que una sociedad como la española salga del laberinto. Al nuevo Gobierno le corresponde estabilizar las cuentas y, sobre todo, volver al espíritu reformista, al cambio, que acercó la sociedad española a los vecinos del norte. Jorge Juan argumenta que es posible.
