Cuba reclama a España que subvencione propaganda a favor del régimen castrista

El Gobierno de Cuba ha solicitado a la embajada de España en La Habana que nuestro Ministerio de Exteriores apruebe un proyecto de una ONG española destinado a contribuir «a contrarrestar la información desvirtuada que se ofrece de Cuba en los medios de comunicación europeos», según ha podido saber ABC. La petición se tramitó el mes pasado, una vez cerrado el primer plazo de la convocatoria abierta y permanente de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), dependiente del Ministerio que encabeza ahora Trinidad Jiménez. La ONG «Euskadi-Cuba» ha presentado al segundo procedimiento de la convocatoria un proyecto denominado «Cubainformación: creación de la red para la información-sensibilización-movilización y solidaridad con Cuba», con un presupuesto de 111.904 euros.

De forma oficial y por escrito, el Ministerio de Exteriores cubano reclama que España subvencione propaganda a favor del régimen de los Castro, quizá en la idea de que el ya ex ministro Miguel Ángel Moratinos hubiera sido sensible a dicho ruego dado su empeño por modificar la Posición Común sobre Cuba en la UE. Precisamente hoy, los ministros de Exteriores de la UE analizarán esta cuestión. Aunque en principio la mayoría de los países son refractarios a dejar de condicionar el diálogo con la Isla a la mejora de la situación de los derechos humanos, sí estarían dispuestos a estudiar fórmulas para apoyar cambios como la reciente excarcelación de presos de conciencia, justo cuando el Parlamento Europeo acaba de condecorar al disidente cubano Guillermo Fariñas con el Premio Sajarov a la libertad de conciencia, que distingue a quienes luchan por el respeto a los Derechos Humanos. La Posición Común sólo puede ser modificada por unanimidad de los 27.

La intención declarada del proyecto «Cubainformación», según la página web de la organización «Euskadi-Cuba», es «contrarrestar las mentiras y calumnias diarias contra la Revolución (sic), así como acercar aquellas realidades de la Isla que ocupan los Mass Media». Su labor «es la información alternativa y la contrainformación sobre Cuba».

«Euskadi-Cuba» admite que no es una ONG «por vocación» ya que su solidaridad «es fundamentalmente política». Si abordan proyectos de cooperación es «a petición de las autoridades cubanas». El lenguaje que emplea esta ONG no difiere mucho del recientemente usado para condenar la detención, el pasado 28 de septiembre, de siete personas vinculadas a Askapena, una red cuya función es la propaganda proetarra en el exterior.

En un comunicado hecho público ese día, la organización «Euskadi-Cuba» afirma que las detenciones son «un paso más en la política de criminalización de todo un sector de la sociedad vasca por parte del Gobierno y poder judicial españoles». Además, acusaban a los medios de comunicación de nuestro país de emplear «las mismas groseras mentiras hace ya tiempo desenmascaradas» y legitimar «las pruebas fabricadas por un gobierno que practica el terrorismo de Estado: el gobierno de Colombia».

El pasado marzo, el juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco revelaba en un auto que fue a través de Cuba cómo se originó la «amistad» entre ETA y las FARC, vínculo reconocido en papeles incautados a la banda terrorista. Esta ONG, que consta como tal en el listado de la AECID de organizaciones no gubernamentales para el desarrollo, es una vieja conocida en el País Vasco, donde ha protagonizado sonoros enfrentamientos con el PP. El anterior equipo de Gobierno del ayuntamiento de Vitoria vetó la concesión de cualquier tipo de ayuda económica a la misma, aunque sí las recibe de otras instituciones, como la Diputación Foral de Guipúzcoa.

De forma oficial y por escrito, el Ministerio de Exteriores cubano reclama que España subvencione propaganda a favor del régimen de los Castro, quizá en la idea de que el ya ex ministro Miguel Ángel Moratinos hubiera sido sensible a dicho ruego dado su empeño por modificar la Posición Común sobre Cuba en la UE. Precisamente hoy, los ministros de Exteriores de la UE analizarán esta cuestión. Aunque en principio la mayoría de los países son refractarios a dejar de condicionar el diálogo con la Isla a la mejora de la situación de los derechos humanos, sí estarían dispuestos a estudiar fórmulas para apoyar cambios como la reciente excarcelación de presos de conciencia, justo cuando el Parlamento Europeo acaba de condecorar al disidente cubano Guillermo Fariñas con el Premio Sajarov a la libertad de conciencia, que distingue a quienes luchan por el respeto a los Derechos Humanos. La Posición Común sólo puede ser modificada por unanimidad de los 27.

La intención declarada del proyecto «Cubainformación», según la página web de la organización «Euskadi-Cuba», es «contrarrestar las mentiras y calumnias diarias contra la Revolución (sic), así como acercar aquellas realidades de la Isla que ocupan los Mass Media». Su labor «es la información alternativa y la contrainformación sobre Cuba».

«Euskadi-Cuba» admite que no es una ONG «por vocación» ya que su solidaridad «es fundamentalmente política». Si abordan proyectos de cooperación es «a petición de las autoridades cubanas». El lenguaje que emplea esta ONG no difiere mucho del recientemente usado para condenar la detención, el pasado 28 de septiembre, de siete personas vinculadas a Askapena, una red cuya función es la propaganda proetarra en el exterior.

En un comunicado hecho público ese día, la organización «Euskadi-Cuba» afirma que las detenciones son «un paso más en la política de criminalización de todo un sector de la sociedad vasca por parte del Gobierno y poder judicial españoles». Además, acusaban a los medios de comunicación de nuestro país de emplear «las mismas groseras mentiras hace ya tiempo desenmascaradas» y legitimar «las pruebas fabricadas por un gobierno que practica el terrorismo de Estado: el gobierno de Colombia».

El pasado marzo, el juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco revelaba en un auto que fue a través de Cuba cómo se originó la «amistad» entre ETA y las FARC, vínculo reconocido en papeles incautados a la banda terrorista. Esta ONG, que consta como tal en el listado de la AECID de organizaciones no gubernamentales para el desarrollo, es una vieja conocida en el País Vasco, donde ha protagonizado sonoros enfrentamientos con el PP. El anterior equipo de Gobierno del ayuntamiento de Vitoria vetó la concesión de cualquier tipo de ayuda económica a la misma, aunque sí las recibe de otras instituciones, como la Diputación Foral de Guipúzcoa.