Messi sufre la «lesión del velocista»
La tasa de recurrencia de la rotura del bíceps femoral que sufre el delantero del Barcelona es de hasta el 40 por ciento
Messi sufre la «lesión del velocista»
La nueva lesión de Messi era una posibilidad anunciada , para los especialistas en Medicina Deportiva. Es ya la cuarta que padece el delantero esta temporada . Y cada vez se han ido agravando más, sobrecarga, hematoma, lesión en el bíceps derecho y, ahora, la que esperamos que sea la última: rotura en el bíceps femoral de su pierna izquierda .
Messi es víctima de la conocida como lesión del velocista, un viejo problema en el F: C: Barcelona . Más de ocho de este tipo ha sufrido el equipo en lo que va de año.
El bíceps femoral es un músculo que se encuentra en la parte posterior del muslo , que va desde la pelvis hasta la altura la rodilla. Su función principal es la de extensión del muslo y flexión de la rodilla, de aquí la importancia que tiene en los movimientos normales al practicar fútbol, sobre todo en lo relacionado con el «sprint» explosivo como es el caso de Messi o cualquier velocista.
Frecuentes en el rugby
Las lesiones de los músculos isquiotibiales, los que se sitúan en la región superior y posterior del muslo (semimembranoso, semitendinoso y bíceps femoral), son frecuentes también en deportes como el rugby o el fútbol australiano, entre otros.
Su incidencia, en atletas de elite, es de casi una lesión por cada 1.000 horas de actividad física , una cifra sólo ligeramente inferior a las lesiones producidas en deportes de contacto. Por ejemplo: un equipo de fútbol profesional de 25 jugadores puede esperar 7 lesiones de este tipo por temporada. Lo peor de todo no es la pérdida de horas de competición del atleta de élite, lo devastador es que la tasa de recurrencia del problema , como le ha sucedido al delantero del Barcelona, se estima en entre el 12% y 43%. Unas estadísticas que contribuyen, además, a alimentar el daño psicológico del atleta y minar la confianza en sus médicos y preparadores.
En esta sociedad, en la que todo lo relacionado con el fútbol se magnifica, politiza o radicaliza este tipo de lesión en una estrella genera una espiral de comentarios y opiniones en los que se olvida el factor principal: el paciente y se da la espalda a la evidencia científica para intentar buscar soluciones milagrosas e infalibles que no siempre existen.
Rehablitación, la clave
Entre los factores que van a predecir la evolución del delantero o un periodo de rehabilitación más largo se han enumerado la rotura completa muscular o la avulsión del músculo de su inserción en el hueso. Otros factores que presagian una recuperación más prolongada son las lesiones musculares extensas o largas , observadas en imágenes de Resonancia Magnética y Ecografía. Asimismo, aquéllas que afectan a una gran sección transversal del vientre muscular, las lesiones recurrentes de los isquiotibiales, la persistencia de dolor o restricciones en los test de movilidad forzada de la cadera y rodilla o de la fuerza y la resistencia de los isquiotibiales. Todas ellas pueden oscurecer la evolución del atleta, aunque desafortunadamente hay más.
Así, las lesiones del bíceps femoral, el tipo de deporte que practica el paciente, la persistencia de signos de lesión en imágenes de seguimiento de RM, la localización más proximal de la lesión (en este caso más hacia el glúteo que hacia la rodilla), la existencia de un hematoma grande y profund o o que el problema afecte a la porción más proximal del tendón, también suman en contra del paciente.
Espiral de lesiones
Messi se ha lesionado ahora la otra pierna. Los especialistas en medicina deportiva conocemos los riesgos de entrar en una espiral de lesiones, y el propio jugador ya la sufrió hace unos años, siendo este un factor más que debería ser tenido en cuenta para determinar el pronóstico y actuación ante la nueva lesión que mantiene a la estrella ‘fuera de juego’.
Pese a todas estas consideraciones, hay que valorar que su problema es de la misma naturaleza que los anteriores, aunque ahora en otra pierna y que, en Medicina, se intentan explicar las casualidades como causalidades. Un ejemplo: ¿es normal que Xabi Alonso se haga una fractura de estrés cuando se está recuperando de una operación de pubalgia o es casualidad? Lo normal es pensar que, tras un periodo de menor actividad física, el jugador pase por una fase de acondicionamiento físico que le predisponen a la fractura de estrés cuando se precipita la vuelta a la actividad física.
Con Leo Messi hay que pensar lo mismo. Lo razonable es deducir que si sus actuaciones estaban resultando más irregulares que en épocas anteriores en las que marcaba goles sin parar, la razón podría estar en que no estaba recuperado al 100% de su lesión previa .
Sin recuperación completa de su fuerza, coordinación y propiocepción, de alguna manera, se ha podido ver obligado a modificar su forma de apoyarse o a forzar su pierna sana , simplemente, por el hecho de proteger su pierna lesionada, aunque fuera incluso de forma subconsciente.
Otros factores, como los extrínsecos, son los que no dependen directamente del deportista como el estado del terreno de juego, dinámicas de entrenamiento, descansos, contexto competitivo, temperatura y humedad…
Drenajes y plasma
En cuanto al tratamiento y la recuperación , hay que valorar que si el hematoma es muy importante se suele hacer un seguimiento ecográfico, o mediante RMN, del mismo y, dependiendo de su evolución, se puede plantear su drenaje parcial, para prevenir encapsulamientos y cicatrizaciones que comprometan a la larga la función del grupo muscular. También se puede considerar la infiltración de plasma rico en factores de crecimiento (PRFC) para acelerar la reparación y regeneración tisular.
A partir de la primera semana, las medidas comienzan a orientarse a que la cicatrización del músculo sea funcional y organizada. A partir de la semana y media o dos semanas, de una forma muy controlada, se pueden introducir los ejercicios excéntricos, los estiramientos y la electrolísis percutánea intratisular (EPI), que han demostrado contribuir a organizar las fibras musculares.
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