Fito Páez derrocha talento en su primer concierto en Sevilla

Fernando Rodríguez Murube

Sevilla

07/07/2023
Actualizado a las 14:58h.

Compartir

Esta funcionalidad es sólo para registrados

Iniciar sesión

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete

Argentina siempre ha destacado por su altísimo nivel futbolístico –de hecho, es la actual campeona del mundo–, poseedora de la mayor cantera de jugadores de la que se nutren tradicionalmente los clubes europeos y, especialmente, la liga española. No menos prolijo y talentoso es el vivero de cantautores rockeros del país sudamericano, especialmente brillante fue la generación emergida en los ochenta: Charly García, Luis Alberto Spinetta, Andrés Calamaro, Gustavo Cerati.

En esta lista, aristocracia pura no solo del rock argentino, sino de toda Latinoamérica, también se encuentra con letras de oro el gran Fito Páez, carismático artista nacido en Rosario, igual que Messi (ambos cuentan con un mural homenaje en su ciudad natal).

A sus 60 años, el cantautor está viviendo en este 2023 una segunda juventud artística, gloriosa y fértil, casi tanto como aquella primera de los ochenta. Tras un periodo en barrena, en parte por algunas declaraciones en clave política que no sentaron muy bien en ciertos sectores de la sociedad de su país, el cantautor ha recuperado todo su lustre gracias al exitoso biopic que Netflix estrenó en abril sobre su figura, que ha derivado en un récord de descargas de sus temas en Spotify, y sobre todo debido la magnífica gira con la que está conmemorando el 30 aniversario de su disco más importante, 'El amor después del amor'.

Dicho tour hizo anoche parada en Icónica Sevilla Fest, en el que supuso el primer concierto de su vida en la capital hispalense. «¡Sevilla, cómo te quiero! Esta tarde paseé y ya me enamoré de ti», celebró el artista tras abrir con 'El amor después del amor', su canción más emblemática y la que da nombre al disco, a la gira y a la popular serie. «Esto va a ser una locura esta noche, como ocurre todas las primeras veces».

Divertido y expresivo, Fito dejó constancia de su dominio de la palabra, «artefactos tan mentirosos que enmascaran», según su propia definición. Transmitió con soltura académica la exposición de sus conceptos, las explicaciones introductorias y orígenes de las canciones, sus recuerdos ochenteros.

En uno de sus agradecimientos, el rosarino se equivocó y dijo «gracias, Valencia«, pero inmediatamente rectificó y enlazó con una canción improvisada a piano para justificar su error con una divertida disertación cantada que los espectadores recibieron entre risas y aplausos.

Ajustado siempre a la medida esencial del rock elegante, bien refugiado en su icónico piano o en la guitarra, mástiles que domina y lidera cual capitán manda desde el mascarón de proa, Fito Páez brilló con un show que pivotó en torno a 'EADDA9223', el álbum que estrenó hace unos días con el que revisita con absoluta brillantez el glorioso álbum antes mencionado, en el podio de los más vendidos de la historia del rock argentino.

Las siglas del nuevo trabajo están compuestas por las iniciales del álbum original sumando las últimas dos cifras de su año de edición,1992, y del de lanzamiento actual, 2023. Tanto se ajustó al flamante disco, que hasta el orden de las canciones del repertorio coincidió con el set de estudio primigenio. La instrumentación, los arreglos, incluso algunos momentos de las interpretaciones se ajustaron más a esta nueva edición que a la de hace 30 años. Así, fueron cayendo en cascada con una lúcida mirada actual 'Dos días en la vida', 'La verónica', Tráfico de Katmandú' o la poética 'Pétalo de sal'.

Sobresaliente fue la versión de 'Un vestido y un amor', inspirada en el 'Mother nature's son' de The Beatles, sin duda, una de las favoritas del público, que hizo de coro obediente dirigido por el propio artista, literalmente cual director de orquesta al que solo le faltó la batuta real. 'Enhorabuena a todos, os digo de verdad que ha sido el mejor coro de toda la gira, no es fácil, fuertes aplausos para vosotros'.

Además de tocar casi todo 'EADDA9223', Fito no dejó atrás otros temas imprescindibles de su extenso cancionero, destacando sobremanera '11 y 6', 'Ciudad de pobres corazones', 'Dar es dar', 'Mariposa tecknicolor' y 'Y dale alegría a mi corazón' (fabulosa despedida en emocionante comunión con los espectadores), cinco ases extraídos de 'Euforia', su otro trabajo principal, con los que el trovador del rock argentino se despidió muy arriba de los cerca de dos mil fans (compatriotas la gran mayoría) que acudieron al concierto celebrado en la Plaza de España.

Ver comentarios (0)

Reportar un error

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete