China recurre a Internet para reconstruir 7.000 años de Historia
Un ambicioso proyecto lanzado en China busca construir una base de datos que incluya todos los documentos históricos posibles desde el año 7.000 AC hasta 1911, un plan que reclamará la ayuda de los casi 100 millones de cibernautas del país.
El proyecto, que comenzó a funcionar el 23 de junio, es llevado a cabo por la Sociedad de Investigación Cultural de China, cuyo presidente, Lu Jun, es el padre de la idea.
Lu contó hoy, lunes, en una entrevista que el enorme proyecto "nunca terminará", ya que será un trabajo permanente de recopilación, corrección y clasificación de datos en el que cualquier persona interesada podrá colaborar, "y deberá ser continuado por nuestros descendientes".
"Lo que nos mueve es crear una plataforma para la investigación histórica, crear una lista cronológica de todos los documentos y datos históricos, no sólo clasificada año a año, sino mes a mes si es posible", destacó el experto.
Aunque el proyecto será largo y complicado, el experto reconoció que la historia de la civilización china es tan grande y compleja que "si acabamos conociendo el uno por ciento del total, ya nos podremos dar por satisfechos".
El sistema de creación de la base de datos histórica, a la que se accederá a través de la página www.china-can.com, es similar al de la enciclopedia electrónica Wikipedia, uno de los recursos de Internet más utilizados en el mundo.
Wikipedia, que cuenta ya con 1.300.000 artículos en 162 idiomas (598.000 en inglés, 52.000 en español), permite a modificar una página en cualquier momento y ver los cambios al instante. En el caso de la base de datos sobre la Historia china, se utilizarán softwares similares para que los navegantes de Internet, debidamente registrados, puedan modificar las páginas, aunque en este caso se buscan solo textos procedentes de documentos históricos.
Lu explicó a EFE que se podrán aportar datos en cualquier idioma, no sólo en mandarín, "el internauta podrá colocar un párrafo de un libro o cualquier otro fragmento de un documento que pueda aportar datos relevantes, incluso en español".
El periodo a tratar, desde el Neolítico chino hasta 1911, abarca todas las dinastías imperiales, pero no la República de China (1911-1949) ni el periodo comunista iniciado en 1949. Para dar acogida a la base de datos, la Sociedad de Investigación Cultural de China dispondrá de memoria suficiente para almacenar 35 millones de imágenes y sonidos y 50.000 millones de caracteres, destacó la agencia oficial de noticias Xinhua.
Lu señaló que con este plan, el estudio de la Historia de China "ya no sólo dependerá de los expertos especializados"y añadió que emprenderán una campaña informativa para incorporar la colaboración de los ciudadanos.
Un panel de expertos revisará los datos que los internautas vayan introduciendo: "Lo primero es meter todos los datos en el 'cubo', luego ya habrá tiempo de revisarlos", afirmó.
La base informática ayudará a China a reparar daños cometidos a la memoria histórica nacional durante la Revolución Cultural (1966-76), en la que se destruyeron numerosas fuentes de documentos. Lu explicó que las épocas de las que se conservan menos documentos son las más antiguas: no hay documentos escritos, por ejemplo de la dinastía Xia, (siglos XX al XV antes de nuestra era).
Según se avanza en el tiempo, aumenta el número de documentos: Lu calcula en 400.000 los caparazones de tortuga con inscripciones (primeras muestras de escritura en China) en la siguiente dinastía, Shang (siglos XV y X).
De la dinastía Qin, primera que unificó China (221-207 AC), se conservan ya 10.000 millones de pruebas documentales, bien en bambú, en seda o en inscripciones en piedra (el papel llegó 300 años después).
Según Lu, la nueva base de datos facilitará la investigación de los historiadores: "Será como si un cocinero pudiera contar al instante con todos los ingredientes del país a la hora de hacer un plato", comparó.
Noticias relacionadas
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete