La mejor bocatería de Andalucía ya tiene nuevo local en El Perchel

La historia reciente de Los Delfines es meteórica. En apenas unos años, el pequeño local de la Alameda de Barceló pasó de ser una bocatería de barrio a convertirse en uno de los restaurantes de comida rápida más valorados del sur de España. Sus camperos, sus combinaciones contundentes y, sobre todo, sus salsas caseras, han levantado devoción dentro y fuera de la provincia.

El reconocimiento de Just Eat, que los situó como mejor bocatería de Andalucía y uno de los más destacados del país, terminó de consolidar un fenómeno que se traducía en colas permanentes, esperas de más de una hora y familias que viajaban desde otros pueblos solo para cenar allí. Con esa demanda desbordada, la expansión era cuestión de tiempo.

El nuevo local ocupa el histórico espacio que dejó Las Merchanas junto a la iglesia del Carmen, en la plaza de la Misericordia, a dos pasos del mercado. Un enclave clave, con más espacio interior, terraza amplia y una capacidad que prácticamente duplica la de Capuchinos. De 70 plazas se ha pasado a unas 150, permitiendo absorber parte de la enorme clientela que se quedaba sin sitio en el local original.

La estética conserva la identidad de Los Delfines: informal, cómoda y pensada para grupos, parejas o familias que buscan comer mucho y bien sin complicaciones.

En El Perchel se replica la carta que los hizo famosos: casi 80 opciones entre camperos, bocadillos, pepitos, perritos, hamburguesas, crestas y combinaciones para todos los gustos.

Pero el secreto de Los Delfines no está solo en el tamaño de sus bocadillos, sino en sus salsas, auténtico sello de la casa. El alioli casero —«el que roba corazones», como llaman a su receta secreta— y la salsa cheddar artesanal son parte del ADN de la marca y protagonistas del éxito de muchos de sus platos.

Para El Perchel, además, han incorporado algunos guiños gastronómicos del antiguo local de Las Merchanas, como las lagrimitas o su ensaladilla, integrándolos de forma natural en la carta como homenaje al histórico espacio que ahora ocupan.

La llegada de Los Delfines al Perchel no pasó desapercibida: el primer vídeo que anunciaba la apertura acumuló miles de visualizaciones en pocas horas y los mensajes de bienvenida se multiplicaron entre vecinos del barrio y clientes habituales que ahora tendrán dos direcciones donde matar el antojo.

Casi a contrarreloj, el nuevo local abrió finalmente sus puertas, marcando la tercera sede de la marca (junto a Capuchinos y Fuente Olletas, esta última dedicada exclusivamente a pedidos a domicilio).