Así se jugaba al ajedrez en Al Ándalus

Traje de baño como uniforme, silencio, vapores, aguas termales y varios tableros de ajedrez flotando en el centro de la piscina conforman el escenario en el que 40 jugadores compiten por convertirse en el ganador del VI Campeonato de Ajedrez en el Agua, cuya fase clasificatoria tiene lugar en Córdoba.

El torneo se juega en los baños califales, unas termas árabes andalusíes situadas en pleno Casco y que durante unas horas recuperan parte de la tradición y esencia para la que fueron creados, ese espacio que se consagraba por igual a la higiene y al ocio.

La gerente de los baños califales de Córdoba, Antonia Alcántara, ha explicado a Efe que la empresa Hamman Al Ándalus ha conseguido con este torneo, asentado tras cinco ediciones, recuperar la esencia de los baños califales en la época andalusí.

Alcántara ha recordado que Al Ándalus fue una puerta por la que asomaron grandes avances científicos y culturales gracias a la expansión de los árabes, que además fueron quienes importaron el ajedrez, un juego que se practicaba en los baños árabes, convertidos en un punto de lectura, debate y cultura, además de en centro de higiene y relajación.

Bajo esta premisa, hace seis años se creó el torneo Ajedrez en el Agua, que convocó a más de un centenar de ajedrecistas aficionados para practicar su destreza en remojo en los centros que la empresa tiene en las provincias de Córdoba, Málaga, Granada y Madrid.

Cuatro torneos independientes, uno por ciudad, llevarán a una final que se desarrollará el 2 de diciembre en Málaga, y que enfrentará a los cuatro vencedores provinciales en las cálidas aguas de los baños termales malagueños.

Alcántara explica que, si bien el primer año esta iniciativa sorprendió por su novedad -suscitando reacciones encontradas entre los jugadores de ajedrez-, tras cinco años se ha convertido en una actividad demandada tanto por los ajedrecistas como por los clientes habituales de las termas.