país vasco
«Txikito de Amorebieta», el torero batasuno
El exportavoz de la «mesa nacional» Jon Idígoras defendió a «capa y espada» la fiesta de los toros, cuya prohibición volverá a pedir el alcalde bildutarra de San Sebastián, Juan Karlos Izagirre

Toreó novillos en algunas de las mejores plazas, como Vergara, Eibar, Tolosa y Zarauz, con los apodos de «Txikito de Amorebieta» o «Morenito Alto». Jon Idígoras Gerrikabeitia , sin embargo, no llegó a tomar la alternativa como torero, según reconocía a sus amigos, porque su fealdad manifiesta asustaba a los morlacos que, en lugar de entrarle, se amansaban y eran enviados al corral. Pero lo cierto es que Idígoras dejó la verónica, cambió el novillo por la «Ternera» y se hizo subalterno de los «Txomin», «Santi Potros» y «Pakito».
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En sus memorias «El hijo de Juanita Gerrikabeitia» , se define como «militante obrero con aficiones taurinas». Aunque fue un poco más allá, porque llegó a pisar el ruedo, en una primera época, como subalterno en la cuadrilla del Duque de Boroa. En alguna ocasión toreó a beneficio de los huérfanos de la Guardia Civil. Después se independizó..., como novillero, y tuvo bajo sus órdenes al mozo de espadas, José Ignacio López de Arriortúa , el prestigioso ingeniero «Supero López».
Del novillo a ETA
Idígoras, además, fue empresario «fugaz», según relata en sus memorias, y fundó con un grupo de amigos un club taurino, que tenía su sede en el bar «Txilibitu». La «taurina taberna» estaba adornada con fotos de grandes maestros como Manolete, Litri, El Viti, Luis Miguel Dominguín, Antonio Ordóñez, El Cordobés...
Idígoras, de cuyo fallecimiento se cumplirá el próximo 3 de junio 5 años, mantuvo hasta el final su afición a los toros. Sin embargo, optó por cortarse la coleta y tomar la alternativa como dirigente y portavoz de Herri Batasuna, allá por los «años de plomo». Dejó entonces de jalear al novillo, para espolear a ETA. Cambió la «cuadrilla» por el «comando» . Dejó de ser novillero para hacerse matador, pero siguió defendiendo la fiesta, esa que su heredero político, el alcalde de San Sebastián, bildutarra Juan Karlos Eizagirre, quiere erradicar, al menos de la plaza de Illumbe.
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