El «error garrafal» de Alessandra

No leerse el prospecto de un medicamento puede traer consecuencias graves en cualquier persona. Pero si esa persona es deportista profesional, puede conllevar además problemas en su carrera. La maratoniana Alessandra Aguilar dio positivo por heptaminol (un estimulante prohibido solo en competición) tras ganar, el 8 de diciembre pasado, el cross de Cantimpalos (Segovia), según ha revelado la propia atleta. Asegura que fue de forma no intencionada, por un despiste. El caso está en manos del Comité de Competición de la Federación Española, que podría sancionarla entre tres y seis meses (en este caso se perdería los Juegos de Londres).

Antonio Serrano, entrenador de Aguilar, ha declarado a Efe que la atleta lucense «ha cometido un error garrafal, por no leerse el prospecto, y tiene que asumirlo y pagar su culpa, pero ha sido una sustancia suave y ha dado la cara. Aquí no se esconde nada. Trabajamos limpio». Serrano defiende a su pupila: «La apoyo porque la creo».

El grupo de Serrano, al que pertenecen también atletas como Chema Martínez, Pablo Villalobos y Loli Checa, entre otros, se significó por sus críticas hacia los atletas relacionados con la Operación Galgo. «La gente que nos conoce sabe como trabajamos. Es posible que haya algunos que se puedan alegrar por esto, pero a mí no me han dicho nada. La mayoría de los atletas de alto nivel tienen médicos que les ayudan a llevar una vida ordenada; en esto yo, como entrenador, no entro ni salgo, pero está claro que la aconsejaré que no siga con él», afirmó en alusión al médico Javier Núñez.