Las administraciones batallan por unos Juegos que saquen a España de la crisis

Además, añadió el presidente González, «aportó 50.000 empleos, 20.000 de ellos fijos, y 20.000 millones de euros en volumen de negocios». La alcaldesa aseguró además que Madrid 2020 será un proyecto de futuro «con independencia de los cambios políticos» que se puedan producir: no en vano, cuenta con el apoyo de los dos partidos mayoritarios, PP y PSOE.

La alcaldesa recordó que la candidatura olímpica para 2020, que se ha formalizado ya ante el Comité Olímpico Internacional. estará marcada por la austeridad. De los 1.500 millones de euros de inversión necesarios -y que pagarán las tres administraciones a partes iguales- «no se gastará nada antes de 2015». «No son compromisos imprudentes ni temerarios», recordó el ministro Wert. Dio también las gracias Botella por el «comportamiento ejemplar de la sociedad española» pese a la situación económica del país.

También explicó que la Villa Olímpica se convertirá, tras los Juegos, en una zona de viviendas sociales. Entre las mejoras a realizar, una apuntada por el presidente de los Paralímpicos españoles, Miguel Carballeda: «Los taxis accesibles para personas en silla de rueda son un 3 por ciento del total, y en 2020 serán el 8 por ciento».

El segundo, el problema con el Estadio Olímpico, al quedar pendiente de un hilo el convenio cerrado con el Atlético de Madrid y dos empresas privadas para trasladar el Vicente Calderón a la actual Peineta y garantizar así su puso postevento olímpico. «El Estadio estará construido en su momento», fue la escueta respuesta de la alcaldesa.

El presidente del Comité Olímpico Español y de la candidatura madrileña, Alejandro Blanco, definió 2013 como «un año irrepetible»: en ocho meses, el 7 de septiembre, se sabrá si Madrid alberga los Juegos de 2020. «Madrid y España- resumió- necesitan los Juegos».