Gibraltar arranca un empate en su debut oficial

Una mezcla de entusiasmo y nerviosismo se respiraba en el Estadio del Algarve, Faro, donde la selección de fútbol de Gibraltar jugó su primer partido internacional, contra Eslovaquia, desde que fue reconocida oficialmente por la UEFA el pasado mes de mayo. Vistieron su equipación roja con una raya blanca en la camiseta , y hubo bufandas rojiblancas y banderas con el escudo de Gibraltar. Tampoco faltó el himno, del que nadie se supo la letra, “es muy reciente”, comentaba la afición.

El resultado de este amistoso era lo de menos, aunque un empate en el debut (0-0) fue celebrado por todo lo alto por los escasos 500 gibraltareños que se trasladaron hasta Portugal. “Esta es una victoria del fútbol”, afirmó el ministro principal de Gibraltar, Fabian Raymond Picardo, quien se lamentó de no haber podido jugar en España este partido, en el estadio La línea de la Concepción. “ Es una pena porque el deporte y la política no deberían tener nada que ver ”, añadió. Para el presidente de la Asociación de Fútbol de Gibraltar, Desmond Reoch, fue “un momento histórico y la comunidad del fútbol está muy orgullosa”.

La afición tampoco escondía su alegría, “es uno de los mejores días de mi vida, hemos luchado por esto mucho tiempo y es algo muy grande”, explicaba Jon, también molesto por desplazarse hasta tan lejos, un día entre semana, teniendo campos más cercanos en Andalucía. “ Hemos pagado 25.000 libras para jugar en este campo y hubiésemos podido dejar mucho dinero en la zona fronteriza con Gibraltar, muy necesitada, y gente amiga”, añadió el gibraltareño.

España se convirtió en otro de los protagonistas de este encuentro histórico para la colonia inglesa que fue además el primer evento deportivo fuera de Gibraltar retransmitido en directo por la televisión local. En las gradas se escuchaban gritos contra del presidente de la Federación Española de Fútbol, por oponerse a la entrada de Gibraltar en la UEFA. “ Villar, cabrón, aquí la selección ” o “bote, bote, bote, español el que no bote” fueron cánticos repetidos durante todo el partido.

La selección de Eslovaquia fue un espectador más en este encuentro porque independientemente de su rendimiento en el campo, el protagonismo lo tuvo ayer Gibraltar. Todos los jugadores fueron estrellas y aseguran que ahora quieren disfrutar de este momento e ir poco a poco. La mayor parte de ellos son amateurs aunque ha entrado algo de dinero para poder repartir entre los futbolistas. El seleccionador Allen Bula tiene un deseo, el de jugar contra Inglaterra en Wimbledon y la afición otro más, enfrentarse a la selección española.