DISOLVER LA ASAMBLEA NACIONAL CATALANA YA

PROSIGUE el desvarío. La autodenominada Asamblea Nacional Catalana (ANC), una marioneta política financiada por CiU para que marque la «hoja de ruta» hacia la independencia, expuso ayer sus planes para el futuro próximo, que pasan por la declaración unilateral de independencia coincidiendo con la festividad ... de San Jorge del año que viene. La ANC va incluso más allá del gesto formal de la proclamación y propone para ese 23 de abril la «toma de control de las grandes infraestructuras y fronteras –puertos, aeropuertos–, la seguridad pública y las comunicaciones» si la consulta ilegal no se puede celebrar. Hablamos, por tanto, de un golpe sedicioso, ya sin matices ni eufemismos, que requiere una desautorización inmediata de la Generalitat. Como es improbable que esto se produzca, compete a las otras autoridades del Estado responder de forma contundente a este último desafío, promoviendo en los tribunales la inmediata disolución de ese entramado que ya tiene fecha y procedimiento para subvertir el orden constitucional. Todo tiene un límite, y si ya existen planes específicos para la sedición se han de detener sin demora. La Abogacía del Estado y la Fiscalía deben promover, además, las acciones pertinentes para sentar ante el juez a los promotores de este insensato y peligroso proyecto.