Rayos y truenos en el río
El rock más decibélico comenzó a rugir anoche en el MTV Beach que se celebra en la explanada de Madrid Río
Todo apuntaba a que caerían del cielo gris que ayer cubría Madrid a últimas horas de la tarde, pero los únicos rayos y truenos que ensordecieron a las miles de personas asistentes al MTV Beach vinieron del escenario del que hacia las diez de la noche se apoderó Triángulo de Amor Bizarro , una formación gallega que sabe cómo hacer que el ruido se transforme en algo encantador, vigorizante y embriagador.
Fue el momento cumbre de una velada que se temía lluviosa —al final sólo fueron unas gotas—, pero que certificó el éxito de la primera edición de este festival que se celebra durante tres días en la Explanada del Rey, en Madrid Río .
Se pasó con nota la primera jornada, con un buen número de visitantes, una correcta organización y un buen sonido en todos los conciertos. El único disgusto se lo llevaron algunos grupos de menores de edad, a los que se les borró la sonrisa por la gratuidad del evento al enterarse de que para acceder debían ir acompañados por un adulto.
Aun así se registró una alta entrada joven, algo que celebraron los madrileños Nothink: «Es una gozada tener una oportunidad como esta para tocar para todos los públicos», dijo su cantante, que no paró de agradecer los ánimos de la numerosa hinchada que acudió a su actuación. Muy merecidos además, porque los de Majadahonda demostraron tener un gran directo , con los tiempos bien medidos y una energía que ojalá les dure mucho tiempo. «Iba a llover… ¡y al final todo ha salido increíble!», se felicitaba el vocalista entre los gritos de «¡Nothink!, ¡Nothink!».
Mejorados en vivo
Sus tres discos sonaron contundentes y mejorados en vivo, tal y como suele comportarse toda banda curtida en local de ensayo, lanzando sus ritmos a medio camino entre el grunge y el rock más musculoso hasta las paredes de la estación de Príncipe Pío , donde los ecos atrayeron a más curiosos hacia la Explanada. «Me imagino que muchos estaréis aquí de rebote, así que lo voy a decir otra vez: somos Nothink», decía el cantante mientras sus fans le recordaban que de rebote, nada.
Cuando los últimos corredores de footing pasaban entre el —comedido— botellón, Triángulo de Amor Bizarro salió a enchufar sus instrumentos. Muchos se acercaron al escenario para ver qué ocurría, pobres incautos. No sabían lo que les esperaba.
«Muy chula vuestra playa, sin berberechos pero muy chula» , dijo la cantante y bajista de la banda gallega, antes de pulsar el botón para el comienzo del bombardeo. A la segunda canción, los que llevaban ya un rato cerrando los ojos como doloridos por el volumen brutal se taparon los oídos y enfilaron hacia la salida.
Y es que Triángulo de Amor Bizarro no tocan si no es con los amplificadores a la máxima potencia. Pero esa es solo su primera seña de identidad, pues han sabido crear una marca de los más refrescante en un panorama independiente saturado de pop limpio, en el que sus guitarras chirriantes han llegado como una revolución.
«Estrella azul de España» dio un respiro al respetable que no estaba precisamente disfrutando a tope de los gallegos, pero la descarga más bestia estaba por llegar con una «De la monarquía a la criptocracia» en la que todos corearon el «arréame, arréame», y un «El himno de la bala» que dio ánimos a los que se les acaban las vacaciones («El mejor sitio para descansar / es la Universidad»).
La cosa acabó con muy buen ambiente y más guitarrazos a cargo de los hardcoretas Fucked Up, que dejaron paso a un presentador de la MTV que ejerció de Dj hasta la madrugada, en el arranque del festival que se extenderá hasta mañana.
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