La Red Española de Supercomputación une a los siete ordenadores más potentes
El MareNostrum, el superordenador que gestiona el Barcelona Supercomputing Center-Centro Nacional de Supercomputación (BSC-CNS), se conectará a partir de ahora en red con otros seis superordenadores
El MareNostrum, el superordenador que gestiona el Barcelona Supercomputing Center-Centro Nacional de Supercomputación (BSC-CNS) , se conectará a partir de ahora en red con otros seis superordenadores del resto de España. El objetivo: trabajar en red y mejorar así la capacidad de nuestro país en supercomputación.
Nace así la Red Española de Supercomputación (RES), que será gestionada y tendrá su nodo (centro) principal en el BSC-CNS. Los otros nodos estarán en la Universidad Politécnica de Madrid (en su Centro de Supercomputación y Visualización, CesViMA), en el Instituto de Astrofísica de Canarias, y en las Universidades de Cantabria, Málaga, Valencia y Zaragoza.
La RES fue presentada ayer en la sede del BSC-CNS, sita en el campus norte de Barcelona de la Universidad Politécnica de Cataluña, en un acto presidido por la ministra de Educación y Ciencia, Mercedes Cabrera.
Cabrera destacó que estos siete supercomputadores españoles «se sitúan entre los 500 más potentes del mundo», y que, trabajando unidos en red, darán «respuesta a la creciente demanda de supercomputación de la comunidad científica». En este sentido, la ministra también anunció la futura entrada del CSIC en el patronato del BSC-CNS.
Cabrera explicó que la creación de la RES consigue multiplicar por tres la potencia del MareNostrum, que ahora es el quinto ordenador del mundo y el primero de Europa con sus 94,21 Teraflops (billones de operaciones por segundo).
Por su parte, el director del BSC-CNS, Mateo Valero, detalló que la RES tendrá una capacidad de cálculo de casi 150 Teraflops, la mitad de la que tiene el supercomputador más potente del mundo, el Blue Gene, ubicado Estados Unidos.
De momento, el MareNostrum, desarrollado por IBM, y los otros superordenadores españoles están trabajado, en colaboración con firmas punteras como Microsoft, en más de 200 proyectos distintos. Entre ellos, el estudio del cambio climático o el análisis de proteínas para el diseño de fármacos.
Además, el BSC-CNS estudia cómo multiplicar por 100 la potencia actual del MareNostrum mediante el uso de microprocesadores CELL, los que utilizan las consolas de juegos Playstation 3.
A partir de ahora, un comité de científicos independientes determinará qué grupos de investigación tendrán acceso a la RES, y se espera que el próximo mes de abril sean aprobados los primeros proyectos.
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