Aquí me Quedo: «Aquí me Quedo, homenaje a la Venta Ruiz»

Era una época donde por Reina Mercedes pasaba el tranvía y el barrio estaba delimitado al sur  con el río Guadaíra y la zona de la charca. El Benito Villamarín era el comienzo de la carretera de Cádiz y había que cruzar un puente para llegar a la zona de Pineda y para alcanzar uno de los mejores restaurantes de Sevilla: La Venta Ruiz. Sólo les digo que cuando la cerraron y la tiraron fuimos los amigos a rendirle un silencioso homenaje a tan buenos ratos que allí pasamos.

Viene todo esto a cuento, porque el dueño de Aqui me Quedo es uno de los descendientes de la mítica saga de la Venta Ruiz.

El bar tiene una terraza exterior maravillosa, de la antiguas; solo le pongo el problema del exceso de palomas que casi se suben en las mesas a comer. El servicio es muy atento y rápido y la cocina es de la de los bares antiguos. No siempre hay de todo y eso para mí es una garantía. Fríen el pescado de una manera muy curiosa, pero lo bordan, y el cuchareo es de pasar la tarde entera en el coqueto comedor que tienen dentro.

Para empezar tiene un rico salpicón de langostinos o unas huevas con mayonesa muy ricas. O unas croquetas de puchero o de setas. No se pierdan tampoco la ensaladilla; de  las antiguas ni le falta ni le sobra nada, servida como debe ser -odio las de bolas de helado- y con la mayonesa por encima. como debe ser. Una ricura.

Buenos daditos fritos de bacalao , o de merluza a la romana . También merecen mención los salmonetes .

Los boquerones , como ya he comentado, están fritos con un color que a mí no me choca y que me recuerdan a cómo me los comía antiguamente. No es un tema de cambio de aceite o no , es la manera de enharinarlo y de freírlos. De los mejores que he tomado hace tiempo, y eso que los pruebo a menudo.

De los guisos me quedo con las espinacas con garbanzos y los que haya el día que se acerquen. Pero no se pierdan el bacalao dorado , que recuerda al que ponían en Casa Arturo  de Gines. Con eso queda dicho todo.

Ricas y sabrosas alcachofas con jamón , que tienen según temporada.

Y dejo para el final, lo que para mí es como una reliquia, algo que creia perdido: el mítico filetito plancha de la Venta Ruiz .

Además de las patatas fritas o de las zanahorias aliñadas , lo mejor es el filete que ha debido estar macerado previamente y con el corte y grosor justo. Más de medio siglo de recuerdos…

Gracias a los Aquí me Quedo por volver a regalarnos un bar de los de toda la vida.