Cocina alemana y libanesa se dan la mano en la cocina de Onkel Willi, que regresa ocho años después de su cierre
Onkel Willi, esperado retorno en Torremolinos
Daniel Sosa regresa al frente de la cocina del restaurante, que apuesta por volver con la misma carta y mismas recetas que lo convirtieron en un lugar un tanto popular en la Costa del Sol.
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Iniciar sesiónLa vuelta de Onkel Willi es probablemente una de las grandes alegrías en el Paseo Marítimo de Torremolinos. Son muchos los que tras su cierre en 2014 lo echaban de menos y con la reapertura han recuperado recuerdos, sabores y platos ... que parecen no haberse ido. Como asegura Daniel Sosa, que ya estuvo en las cocinas de Onkel Willi en su anterior etapa, siguen con la misma carta y las mismas recetas que los hicieran tan populares desde su apertura.
El cambio estético, con un local mucho más luminoso y adecuado a los tiempos que corren, ha sido una actualización en ambiente y decoración, una puesta a punto, pero la renovación ha preservado lo más importante, toda la esencia de su cocina . La mezcla de platos alemanes y libaneses en un ambiente informal y distendido sigue siendo el sello de un local en el que disfrutar de forma relajada.
A valorar las elaboraciones de carnes y verduras, caseras, frescas y de calidad y las salsas que también hacen ellos. De la oferta de cocina alemana solo probamos la ensalada de patata con patatas cocidas, manzana Golden, cebolla y rabanilla . Muy sabroso el toque de la manzana, que le da frescura y un punto crujiente muy gustoso a la ensalada. Quizá la ración se quedaba algo escasa o puede que fuese solo la sensación de cuando algo te agrada y te apetece tomar más.
Si te llaman las opciones libanesas de la carta, lánzate a por el baba ganoush , una rica crema de berenjenas que ellos presentan con guindillas vascas que refrescan y le dan un toque diferente. La combinación es más que apetecible. Otro de los platos de éxito de la carta son los pinchitos de cordero , con una marinada muy agradable y acompañados de buenas patatas fritas. Pero fueron sus shawarmas los que, sin duda, triunfaron en nuestra mesa y serán una de nuestras primeras peticiones en próximas visitas. Tomamos el kefta , tremendamente jugoso y el falafel , con unos crujientes de garbanzos molidos sabrosísimos. Los dos envueltos en rico pan pita y con las salsas servidas aparte, para que seas tú el que module el picante que deseas. Lo suyo es ir añadiendo poco a poco, si te pasas, siempre podrás recurrir a una Paulaner de barril, en su versión lager o de trigo.
El toque dulce de la carta lo pone la baklava , esos adictivos pastelillos de masa filo bañados en jarabe de miel y coronados de frutos secos. Nos quedamos con las ganas de tomar los de pistacho, pero su popularidad los hizo volar, así que nos conformamos con los de nuez, que no estaban nada mal. Siempre es bueno quedarse con ganas de algo para volver.
Para otra ocasión dejamos el hummus , que puedes tomar solo o acompañado de carne y por supuesto su propuesta más alemana, la salchicha al curry . Servicio joven, muy agradable y dispuesto , que seguro irá cogiendo muchas más tablas conforme vayan pasando las semanas.
Onkel Willi está situado en el paseo marítimo de Torremolinos, en el número 51, en Playamar Beach. Para reservas el teléfono 638 80 06 16. Entre los platos destacados figura la salchicha al curry, el shawarma falafel y el kefta kebab.
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