Lo único de las procesiones de Lorca
Entre otras cosas, las celebraciones de la Semana Santa conforman un detallado y rico catálogo de las particularidades del sentimiento religioso a lo largo y ancho de España. Ante tan amplio abanico, no todos los rincones del país sienten bien explicadas sus peculiaridades. Le sucedió a MARÍA FRANCISCO ARCAS, mayordomo de la muy Ilustre y Real Cofradía de Nuestra Señora del Rosario Paso Blanco, de Lorca, que comenta en su carta el artículo titulado «Otra Semana Santa, la Procesión más recóndita», del 13 de abril. «En cuanto concierne a la Semana Santa de Lorca (Murcia) –escribe– se dice que son procesiones “paganas”. No podemos los lorquinos callar y admitir dicho título ofensivo, porque las procesiones de Semana Santa de Lorca son religiosas y cristianas, si bien es cierto que no se ajustan al “modelo tradicional”, lo cual las hace únicas en España».
Y María Francisca Arcas, licenciada en Ciencias Religiosas, explica la especificidad de estas celebraciones: «Las Procesiones de Semana Santa de Lorca se contemplan dentro de las coordenadas de la “Historia de la Salvación”, una historia que abarca el Antiguo y Nuevo Testamento, pero también la Historia en general, y cuyo centro indiscutible es Cristo-Jesús. Por ello procesionan personajes no solo bíblicos, sino también históricos e incluso mitológicos, y como en un friso viviente se contemplan civilizaciones, reinos, e imperios que surgen y caen, porque todo lo que no es Dios es tránsito y efímero. Solo Dios permanece. Las procesiones de Semana Santa de Lorca son cristocéntricas porque para un cristiano sin Cristo los tiempos correrían en vano, y con Él, la Historia camina a un desenlace definitivo. Él es el “Eschatos”, el alfa y omega. Las procesiones de Lorca nos ofrecen una catequesis compleja de profundo contenido teológico a la vez que son un monumento religioso-cultural único», asegura.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete