El PSOE denuncia que el PP quiere hacer «negocio» con los ayuntamientos

«El nuevo sistema va a significar servicios municipales más caros, una menor eficiencia y el resultado será más recursos públicos para las empresas privadas», dijo el pasado viernes el secretario de Ciudades y Política Municipal de los socialistas, Gaspar Zarrías.

Lo hacía tras reunirse en la sede de Ferraz con alcaldes del Consejo Territorial del PSOE, representantes de las consejerías autonómicas socialistas competentes en la materia; presidentes socialistas de federaciones territoriales de Municipios y Provincias, así como portavoces socialistas en la Comisión correspondiente de Congreso y Senado.

Los socialistas no se fían y creen que el PP, bajo el señuelo de un supuesto ahorro de 3.500 millones para las arcas públicas, intenta traspasar el «negocio» de los servicios municipales a manos privadas, según fuentes de la Dirección Federal del PSOE consultadas por ABC.

«Un retroceso democrático, además de un atentado contra la autonomía local», señalaba Zarrías en un duro comunicado que presagiaba lo que diría Alfredo Pérez Rubalcaba el sábado ante el Comité Federal: e líder socialista ve «prácticamente imposible» un acuerdo con el Gobierno en la reforma de la Administración Local porque el modelo propuesto supone «un paso previo a la privatización» de servicios.

El PSOE creen que el anteproyecto de ley no hará más austeras, ni aborda los problemas de financiación de los ayuntamientos. Un ejemplo, dice Zarrías, «se multiplica la estructura y se deja como está la Ley de Grandes Ciudades que ha creado distritos, tribunal de reclamaciones, defensor del ciudadano, directores generales…”.

Las grandes beneficiadas de la reforma, a juicio del principal partido de la oposición, van a ser unas diputaciones que no son elegidas por los ciudadanos. Estas gestionarán los servicios privatizados, «previéndose eso sí, su rentabilidad al asegurar la subida de tasas y precios públicos para aumentar el lucro».

«Esta reforma, que no va a suponer un ahorro de 3.500 millones de euros como pregona desde el Ejecutivo, sólo conllevará una merma impresionante de la democracia en el ámbito local y por lo tanto una merma de la capacidad de decisión de sus ciudadanos», sostiene el secretario de Ciudades y Política Municipal socialista.