Montoro tiende la mano para negociar la ley de Emprendedores

«El diálogo está completamente abierto». Ésa ha sido la oferta que el titular de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha lanzado a los grupos durante el debate de totalidad del proyecto de ley de Emprendedores. Un debate eminentemente económico en el que, sin embargo, se han mezclado el caso Bárcenas y la exigencia de comparecencia del jefe del Ejecutivo. Entre crecientes presiones para que el Gobierno sea más transparente, Montoro tendió la mano a la negociación como arma para desactivar las seis enmiendas de totalidad que se presentaban contra un proyecto que el Ejecutivo ha tramitado por la vía de urgencia . PSOE, Izquierda Plural, PNV, BNG, ERC, Amaiur pedían la devolución del texto y a ellos se añadía CiU proponiendo una redacción alternativa.

La disposición de Montoro quedó cristalizada en la prórroga del plazo de presentación de enmiendas parciales, con lo que CiU y ERC retiraron sus vetos confiando en que el plazo de negociación que se abre ahora dé sus frutos. Hacienda, por su parte, acepta estudiar ahora las propuestas de ambos grupos : aumentar el límite desgravable , la inclusión de bonificaciones en la Seguridad Social, la flexibilización del criterio de responsabilidad limitada o la mejora del sistema para el pago de IVA con criterio de caja como propone CiU, además de las nuevas medidas de «economía social» que exige ERC. Hasta el combativo portavoz socialista de Economía, Pedro Saura, mostró su disposición a entablar conversaciones aunque, en privado, el Gobierno apuesta a que no habrá entendimiento con los socialistas .

El titular de Hacienda defendió el proyecto de ley como «ambicioso» subrayando su convencimiento de que será «un arma eficaz para reducir la duración de la crisis y volver cuanto antes a la senda del crecimiento». «Colocará a España a la altura de los países de nuestro entorno», recalcó antes de enfatizar que el país está «pletórico de emprendedores». No compartieron esta visión el resto de los grupos. La mayoría reprochó al titular de Hacienda que el proyecto adolece de graves lagunas, pronosticando que no logrará aliviar la asfixia que padecen los emprendedores. «Una oportunidad perdida» calificó Saura que acusó a Montoro de intentar arreglar el problema con «tirachinas» . «Muchísimo humo y muchísimo titular pero poquísimo contenido», en palabras del potavoz de Economía de CiU, Josep Sánchez Llibre.

Espantada de IU

Como sucedió el martes durante el debate de Educación, el Pleno no estuvo ayer exento de polémica. Nada más comenzar la sesión, los once diputados de Izquierda Plural abandonaron el Hemiciclo en protesta por el veto de los populares a la celebración de sesión de control al Gobierno de esta semana, la última con sesión plenaria hasta septiembre. Aunque en un primer momento el grupo había asegurado que no regresaría al Pleno hasta que transcurrieran las dos horas que suele durar la sesión de control, finalmente han vuelto al Hemiciclo poco más de una hora después. Algo más de sesenta minutos que han dedicado a mantenerse en los pasillos y quejarse ante la prensa. Ya en su turno de palabra, el diputado de Izquierda Plural arrancado su intervención con un «pena y qué vergüenza », expresando una vez más su protesta por la ausencia del presidente del Gobierno. Para el diputado Alberto Garzón, Mariano Rajoy se encuentra «escondido debajo de las piedras» y eludiendo explicaciones cuando «debería dar confianza». El PSOE no ha tardado en seguir a este grupo con el portavoz de Hacienda, Pedro Saura, empezando su alocución asegurando que el taxista que le llevó hasta el Senado le preguntó por qué Rajoy no acude a dar explicaciones. Por su parte, el diputado de UPyD, Álvaro Anchuelo, también ha abierto su intervención con dos reproches al Gobierno. El primero, la celeridad con la que el Gobierno ha tramitado este proyecto de ley -por vía de urgencia-y, el segundo, la reclamación de comparecencia del jefe del Ejecutivo.