Retroanálisis: «Ikaruga», un espectáculo de luces y color

Treasure es una desarrolladora de videojuegos que fue fundada en 1992 por exempleados de Konami . A lo largo de los años se ganó un puesto como una de las mejores, gracias a títulos que ofrecían innovación dentro de los géneros más prolíficos de su época. Ese carácter innovador es el que nos lleva a Ikaruga , un matamarcianos clásico lleno de novedades jugables.

Su lanzamiento tuvo lugar en 2001 para la placa recreativa NAOMI de SEGA , donde ya deslumbró a los jugadores con su increíble acabado gráfico, su innovador sistema de juego y su impecable banda sonora a cargo de Hiroshi Iuchi . Resulta complicado destacar un apartado por encima de otro cuando te encuentras frente uno de los mejores Shoot'em Up de la historia. No obstante, fue su mecánica jugable lo que lo lanzó a la fama.

Lo que hace tan especial a Ikaruga , además de su carácter innovador, es la mezcla resultante entre la sencillez de su planteamiento y la dificultad que conlleva dominarlo. Su jugabilidad se basa en la polaridad. Contamos con una nave capaz de cambiar su polaridad, diferenciada por los colores blanco y negro, y sólo los disparos de la polaridad opuesta pueden acabar con ella. Cambiando la polaridad de la nave también cambiamos el color de nuestros disparos, algo realmente importante si tenemos en cuenta que los disparos negros son el doble de efectivos contra las naves del color opuesto.

Un sistema fácil de comprender que se complica cuando entra en juego el medidor de ataque especial. Al absorber los proyectiles enemigos y los trozos de color que dejan al morir recargamos un ataque teledirigido de vital importancia para nuestra supervivencia en ciertos niveles. El reto de Ikaruga reside en la cuidadosa y constante elección, por parte del jugador, entre la letalidad de acabar con los enemigos usando su polaridad opuesta o la invulnerabilidad que supone utilizar el mismo color que el de sus proyectiles. Toda una prueba de concentración, reflejos y maniobrabilidad.

Esta obra de Treasure supuso un punto de inflexión importante en el género de los Shoot'em Up en lo que a gráficos se refiere, todo un logro si tenemos en cuenta que el equipo de creación estaba formado únicamente por cuatro desarrolladores y un compositor.

Su apartado gráfico dejaba atrás los elementos puramente bidimensionales o la mezcla entre las tres dimensiones y los gráficos convencionales. El equipo de desarrollo creó unos escenarios llenos de detalles y texturas bien definidas, así como unos modelados a la altura de la época. También tuvo especial importancia el juego de luces producidas por ambas polaridades, ideado principalmente para poner a prueba los reflejos del jugador.

Es catalogado por muchos como el segundo mejor de su género por debajo de Radiant Silvergun , su padre espiritual. Con él comparte similitudes como el diseño de las naves o el trasfondo mitológico de su leve argumento. De hecho, al iniciar el juego se nos daba la bienvenida con el texto: "Ikaruga –Project RS 2-".

Ikaruga contó con una edición japonesa para Dreamcast , una internacional para Nintendo Gamecube y finalmente una versión en alta definición descargable para Xbox 360 mediante el bazar de Xbox Live , a un precio de 800 Microsoft Points.