Renault ZOE, ensayo con futuro

La firma del rombo está protagonizando una de las ofensivas eléctricas más interesantes del panorama. De hecho, no sólo acaba de poner a la venta los Twizy , Fluence Z.E. y Kangoo Z.E. , sino que además ha participado intensamente en el desarrollo del Nissan Leaf , todos 100% eléctricos. La cosa no acaba ahí, pues alberga nuevos planes de futuro, entre los que figura un pseudo utilitario, un tanto bivolumen, de 4,10 metros de longitud, 1,79 de anchura y 1,54 metros de altura, derivado del showcar ZOE que se puede ver junto a estas líneas, y que para muchos rezuma diseño y dinamismo. El fabricante augura que el coche definitivo, que puede aterrizar a mediados de 2012, mantendrá un 90% de similitudes estilísticas con un ensayo que, por cierto, monta faros LED y ruedas 205/45 R19. Por cierto, luce 5 puertas (sumado el portón), un capazmaletero de 292 litros y con espacio para 4 o 5 ocupantes.

El ZOE se sirve de un motor eléctrico de 82 CV de potencia, que pone en las ruedas un par límite de 222 Nm desde el arranque. Se trata de una fuerza contundente y abultada, equiparable a la de un turbodiésel medio, que le permite un rápido paso de 0 a 100 km/h de sólo 8,1 segundos, además de una velocidad punta limitada a 135 km/h. Dicho de otro modo: el espacio urbano y periférico será su hábitat natural.

Dispone de batería de ion litio, situada en los huecos habitualmente reservados al depósito de carburante y la rueda de repuesto, recargable entre 6 y 8 horas de forma completa, aunque con 10 minutos conectado a la red doméstica se recupera lo suficiente para completar 50 km. Otra opción es dejar el coche enchufado media hora, tiempo que requiere para hacerse con el 80% de la carga.

El fabricante habla de una autonomía máxima, siempre en función del estilo de conducción, de 160 km, y trabaja en un sistema de relevo rápido de batería, conocido como Quick Drop, que permitiría cambiar una batería vacía por otra llena en puntos específicos en unos minutos.