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Kimberly-Clark enseña su fábrica de Calatayud a posibles compradores

Se mantiene en secreto el nombre de los inversores interesados en quedarse con la planta

Kimberly-Clark enseña su fábrica de Calatayud a posibles compradores abc

R. P.

La fábrica de pañales que Kimberly-Clark tiene en Calatayud recibe esta semana la visita de inversores interesados en comprarla. El pasado octubre, la multinacional estadounidense decidió replegarse del negocio de fabricación de pañales en Europa, donde tiene tres plantas. La del Reino Unido la cierra, la de Calatayud la vende y, de momento, sólo mantendrá la de República Checa.

Los contactos con posibles compradores van avanzando a buen ritmo. Este martes visitó la factoría bilbilitana un grupo de inversores interesados en adquirirla. Este miércoles, otro grupo.

Acompañados de directivos de Kimberly-Clark, algunos de ellos procedentes de su central británica, a estos inversores se les enseña la fábrica de Calatayud, se les explica cómo funcionan las instalaciones y se avanza en detalles sobre la estructura organizativa y de negocio.

Pero, ¿quiénes son los interesados? Kimberly-Clark mantiene mutismo oficial al respecto. Tampoco los representantes sindicales revelan detalles. El presidente del comité de empresa, Jorge Jiménez, ha afirmado a ABC que «no es el momento de entrar en esos detalles», porque se está en una fase del «proceso en el que se han de ir dando unos pasos» y enteiende como lógico que se mantenga la confidencialidad sobre las negociaciones. «No hay nada relevante que comentar», ha indicado.

Mientras tanto, la factoría sigue manteniendo el mismo nivel de producción que tenía antes de que se anunciara su venta. Y entre la plantilla hay relativa tranquilidad sobre el futuro de una fábrica que tanto la dirección de Kimberly-Clark como los trabajadores y el propio Gobierno aragonés -que también sigue de cerca el proceso- coinciden en destacar que es altamente competitiva.

«Los trabajadores confiamos en que al final habrá una buena solución» para el futuro de esta planta, afirma el presidente del comité de empresa.

La factoría bilbilitana de Kimberly-Clark cuenta con una plantilla de 225 personas. Si se cuentan también los puestos de trabajo indirectos -profesionales que prestan servicios y que dependen de la actividad de esta fábrica- la cifra se eleva a alrededor de 300 personas, lo que hace de esta planta un auténtico pilar industrial y de empleo en esta ciudad zaragozana.

De momento, dirección y sindicatos cierran filas para mantener la discreción sobre el proceso de negociaciones que se sigue para la venta de la factoría. Tampoco se habla de plazos para cerrar el traspaso de estas instalaciones, pero no se descarta que pudiera tener lugar antes del verano.

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