Las Monteras: ¡Larga vida al rey de Villanueva!

Ubicado en la localidad de Villanueva del Rey, también resulta un enclave único para realizar rutas culturales por la comarca y por las principales ciudades andaluzas.

Aunque, por supuesto, uno de sus principales reclamos es su restaurante. Como jefe de cocina ejerce Jacinto Florido, firme defensor de los sabores y olores locales, en suma, de la gastronomía tradicional y de caza. En su carta destacan los platos de cocina mediterránea basada en guisos, revueltos, arroces y carnes rojas y de caza.

El establecimiento es famoso por s u ensalada con quesos de Obejo a la miel de caña, jabalí en salsa, solomillo de gamo con frutos rojos y el venado en salsa. Y es que tanto por su localización como por su oferta culinaria, es un punto de encuentro para los amantes de la cinegética y por supuesto de las piezas que se obtienen de la caza.

Apuestan por los manjares de temporada. Y este invierno quienes se sienten a su mesa podrán degustar rabo de toro al estilo cordobés, carrilada ibérica a la serrana, mollejas de cordero, solomillo de gamo con salsa de frutos del bosque, bacalao confitado sobre lecho de pisto, secreto ibérico con salsa árabe y solomillo ibérico al Jerez, entre otras delicias.

«Gestionamos el hotel desde hace dos años, proyecto en el que nadie creía por estar en la zona menos promocionada turísticamente en la provincia, con ayuda de los constructores de ICC, ubicados en Córdoba y del Ayuntamiento comenzamos a promocionarlo fuera de Córdoba a diferentes tour operadores y empresas cinegéticas, consiguiendo ser el cuartel general de muchas de este tipo desde que empieza la temporada de monterías, es decir, desde octubre hasta febrero», explica su directora, Ángeles Gómez.

De ahí que tengan «clientes cinegéticos, de empresa entre semana y un cliente particular que viene con la familia a descansar, a hacer senderismo y a conocer los pueblos y gastronomía de la zona. Este pueblo mantiene sus empedrados y calles antiguas, por lo que le hace tener un encanto que otros pueblos no tienen».