BARES DE BARRIO
El Pacífico: lo exquisito de lo sencillo en el Parque Figueroa de Córdoba
Tapeo tradicional de freidora y plancha sin más secretos que los buenos productos
Sara S. Conde
Hay clientes que atraviesan Córdoba de un extremo a otro para comer los boquerones en vinagre de El Pacífico, un bar de barrio de aires castizos ubicado en el Parque Figueroa. En el lateral de la Plaza de la Marina Española, Julio Cerro sigue atendiendo ... el local que abrió en 1977 junto a su hermano Juan, ya jubilado y al que sustituye en el negocio su hijo Tomás.
Como cuenta Julio con retranca, aquí no hay estrellas ni chaquetillas bordadas. Sabe, por experiencia, que el auténtico lujo se encuentra en los ingredientes de calidad, bien cocinados y servidos de manera generosa. O en esa terraza a la sombra, en una calle peatonal donde no hay tráfico que moleste ni interrumpa las conversaciones.
“Hacemos una cocina sencilla: un tapeo tradicional de freidora y plancha. Sin más secretos que los buenos productos y un buen aceite. Con eso, cualquiera es capaz de hacer buenos platos”, detalla mientras nos muestra las pijotas que está limpiando.
Del éxito de esta fórmula dan fe generaciones de clientes –abuelos, hijos y nietos-, que a lo largo de 46 años se han sentado y se sientan en sus mesas exteriores a tomar una buena fritura de pescado, acompañada de una Cruzcampo muy fría.
“Aquí todo es fresco”, recalca Julio, que cuida la fritura al máximo para que quede blanquita. Y, aunque la fama se la lleva el boquerón, en El Pacífico también se puede tomar japuta, bacalao o calamar a la plancha. Unas gambas al ajillo y unos pinchitos morunos. Sin olvidar los champiñones. Todo servido con generosidad y a precios de “un bar normal”.
El Pacífico se encuentra en el número 57 de la Plaza de la Marina Española, y abre para comidas y cenas. Tiene Cruzcampo de barril.
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