APICULTURA
El delicado oficio de Miel Sierra Filabres
Abejas del desierto que viajan por todo el territorio para obtener mieles únicas
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Iniciar sesiónEn 2009 José Antonio López Sánchez adquiere en Lubrín (Almería) las instalaciones y una envasadora para impulsar el negocio familiar del que él es la tercera generación. Hasta ese momento la producción era reducida y muy artesanal, incluso se vendía bajo el nombre ... de otras marcas. López, conocedor de la calidad de su producto decidió crear su propia marca. Desde entonces, ya suman mieles de once especies florales, premios a la innovación y al emprendimiento joven, así como el reconocimiento de su tierra , que los incluye en el catálogo de productos gourmet de la Diputación provincial, Sabores Almería.
El proceso de producción que sigue Miel Sierra Filabres es el de cualquier empresa apicultora, si bien, están constantemente pensando en nuevos lugares a donde llevar sus abejas con el objetivo de diversificar su producción y oferta . Comienzan la gira con las colmenas en enero con el almendro, en las zonas más altas de Baza con dos o tres floraciones para obtener una miel de esta flor lo más pura posible. De ahí pasan a la flor de azahar hasta primeros de mayo para volver a Lubrín por la flor de albaida o el mastranzo. Después suben a la sierra de Vélez, de 1.800 a 2.000 metros, para aprovechar la floración del tomillo real y la ajedrea hasta el mes de agosto. Además, durante el verano también cubren la floración del eucalipto en zonas de Córdoba y Huelva.
Por último, en agosto bajan de nuevo a Lubrín para otoñarlas, es decir, hacer que descansen, para así volver en otoño con el romero y la ajedrea que crece cerca del pueblo. El ciclo termina en este punto para volver a encadenar con el almendro en invierno y comenzar una nueva gira por los campos. En total, calculan 40.000 abejas que viajan 45.000 kilómetros y visitan más de un millón de flores para elaborar cada tarro de miel.
La vida útil de una abeja alcanza de los 40 a los 70 días de trabajo, según la actividad que tengan. En primera, por ejemplo, alcanzan el pico de trabajo. Por tanto, un mismo ejemplar no es capaz de hacer dos floraciones de especies distintas. La clave está en la regeneración constante de la colmena, cuya fragilidad a los cambios es bastante elevada, sobre todo el cambio climático que les afecta a ellas y a los ciclos de floración, cada vez más precoces . Asimismo, dependiendo del cultivo, la producción es mayor o menor. En este sentido, el gerente explica que “los árboles frutales, como el naranjo, el almendro o el limonero dan más rendimiento, mientras que plantas como el romero, al tener la raíz tan corta, si no llueve, se seca muy rápido y las abejas se quedan mirando igual que nosotros”.
La miel preferida de José Antonio es la de lavanda, que se cosecha entre finales de julio y principios de agosto. Comenta que “es una de las más escasas. El año pasado solo sacamos 150 kilos y nos la guardamos para la familia”.
La colaboración y el beneficio entre agricultores y apicultores es mutuo. Lo que en términos empresariales llaman un win win . Los cultivos son polinizados y el agricultor se garantiza los frutos, mientras que el apicultor consigue llenar sus panales de miel. Un negocio redondo, aunque amenazado por el uso de insecticidas, fertilizantes y el aumento de las temperaturas medias . No obstante, la mayoría de empresas con abejas conocen las fincas a las que llevan sus insectos para asegurarse unas buenas condiciones, como es el caso del gerente de Miel Sierra Filabres, que lleva muchos años trabajando con fincas de confianza.
Una vez terminada la polinización, recolectan la miel antes de trasladarse a la siguiente flor. Si comprueban que las abejas no solo han polinizado la especie deseada, etiquetan el producto bajo la denominación milflores , la más abundante por la dificultad de conseguir que todas las abejas recolecten néctar de una sola especie floral. “Por ese motivo, las mieles de una sola flor siempre son más caras”, precisa López, que asegura que “aunque las muestras son analizadas por un laboratorio, con tantos años ya sé si una miel es pura de cualquier variedad.
Antes de cada viaje retiran la cera de las planchas, la deshacen, la filtran y la decantan para que solo quede la cera virgen y las abejas tengan que dedicarse únicamente a rellenarlas de miel. “Con el tiempo la cera se va ensuciando y oscureciendo. A la abeja le gusta trabajar en una casa limpia , por lo que nosotros la renovamos continuamente. Con esto les quitamos mucho trabajo”. Al contar con la maquinaria necesaria para este proceso, por la que recibieron un premio a la innovación, los pequeños apicultores de la zona acuden a sus instalaciones para que les renueven igualmente sus panales.
El empeño por probar con nuevas plantaciones y ofrecer sabores diferentes , los lleva a salir fuera de sus fronteras. Al margen de recorrerse prácticamente toda Andalucía, piensan ya en subir a zonas de Cuenca, incluso Burgos para ampliar el catálogo de variedades con el roble y el castaño.
Actividades y productos derivados
El hecho de pertenecer a Sabores Almería, la marca agroalimentaria gourmet de la Diputación provincial, les ha reportado “únicamente beneficios, realizan una gran labor”, sostiene José Antonio López. Poder participar en ferias, darse a conocer o ayudas durante la pandemia son algunos de los motivos por los que López reconoce que no se arrepiente de haber entrado a Sabores, “al contrario, deberíamos haber entrado antes”.
También recuerda el ‘Plan Anfitriones Diego García’ , por el que la Diputación entregó hasta 5.000 euros en productos de Sabores Almería a los bares y restaurantes de la provincia. “Es dinero que va rotando dentro de la provincia y a nosotros nos ha abierto muchas puertas”. De hecho, en su caso hasta les ha impulsado a adoptar un nuevo envase, el antigoteo, más adecuado para la hostelería.
Con respecto al plano local , participan en la ruta ‘Viaje al legado natural de Lubrín’, creado por el Ayuntamiento del municipio, mediante el cual los visitantes conocen las principales actividades tradicionales del pueblo, como la almazara, el matadero o la panadería, entre otros.
Por último, cabe destacar que Miel Sierra de Filabres no es solo miel en frascos . Además de haber lanzado un licor de miel casero, también comercializan el propio polen y extracto de propóleo, un estimulante natural de las defensas, antiinflamatorio, antivírico, bactericida y cicatrizante, compuesto generalmente de resinas, polen, cera de abeja y aceites esenciales.
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