Alerrandro rechaza al CSKA y dice 'sí' al Sevilla

Entretanto, el delantero brasileño está entrenando al margen de sus compañeros en Lavra, su ciudad natal. El mismo jugador ha compartido en redes sociales un vídeo en el que se le puede ver cómo trabaja en solitario junto a su preparador físico, acompañado de la frase «cuando llegue el día». Una referencia a su más que probable salida en este mes de enero. En Brasil es época de pretemporada y el Bragantino ve con buenos ojos vender al delantero con el que no cuenta. De hecho, la temporada pasada militó en el EC Vitoria en calidad de cedido y, aunque le queda año y medio de contrato, todas las partes están de acuerdo con su salida.

Con 25 años y 15 goles en sus espaldas durante la pasada campaña, Alerrandro ha sido el objetivo principal del Sevilla tras el fichaje de Juninho por el Flamengo. Las comparaciones son odiosas, puesto que el ex del Qarabag tenía, sobre el papel, unas virtudes técnicas y físicas que habían embelesado a la dirección deportiva sevillista. Si bien Alerrandro es un gran rematador, no destaca por su técnica, pero sí cumple con las características que busca el Sevilla, puesto que Isaac no ha estado muy afinado de cara a portería durante la primera vuelta. El lebrijano sólo lleva tres goles y es Dodi Lukebakio el que ha sacado en más de una ocasión las castañas del fuego a los hispalenses. Y es que el belga lleva ya 9 goles en lo que va de campeonato, lo que ha despertado el interés del Nápoles, que estaba dispuesto a ficharlo en este mercado de invierno. Lukebakio, por el momento, rechaza la idea de marcharse a mitad de temporada. El que sí parece tener una oportunidad para salir del club hispalense es Iheanacho, en las últimas horas ha trascendido que el Panathinaikos estaría interesado en contratar sus servicios.

El mercado de invierno está siendo turbulento para el club de Nervión y su director deportivo, Víctor Orta, quiere cumplir con lo que le prometió en diciembre a García Pimienta, es decir, traer a un extremo y a un delantero. Ambas operaciones podrían haberse cerrado en las primeras semanas de enero, pero la operación frustrada de Juninho dejó al Sevilla sin delantero y con pocas opciones de repuesto en el mercado. De esta forma, Orta se centró en la incorporación de Vargas y pospuso al ariete, aunque este martes ha dado un importante paso adelante. Mientras tanto, Gonzalo Montiel se marchó a River dejando en las arcas sevillista unos cinco millones de euros y queda pendiente la posible venta de Badé. El Aston Villa pretende fichar al francés y, si paga lo que el Sevilla pide, el club se llevaría una buena cantidad de dinero para sanear sus cuentas.