Otro fracaso de Messina ante el Barcelona

Era la primera prueba de fuego del Barcelona Regal en la Euroliga . Su irregular marcha en la Liga Endesa, donde marcha muy lejos de la cabeza tras tres derrotas en seis partidos, no se nota en Europa, donde el equipo de Xavi Pascual se mantiene firme e, incluso, demuestra una fortaleza desconocida en el campeonato doméstico.

En Moscú le esperaba uno de los aspirantes al título. Un CSKA de Moscú muy renovado, pero igual de potente que el año pasado. Las incorporaciones de Sonny Weems (mejor jugador de la Euroliga hasta el momento) y Aaron Jackson han reforzado una plantilla de lujo a la que ha vuelto a dirigir Ettore Messina , viejo conocido de la afición moscovita y rival predilecto de los azulgrana cuando dirigía al Real Madrid .

Y es que, durante su época en la casa blanca, el técnico italiano sumó fracaso tras fracaso ante Xavi Pascual, al que apenas superó en una de ocasión, que además no tuvo trascendencia. Visto lo visto, tenía cierto morbo el duelo, aunque fue el italiano el que volvió a morder el polvo.

La duda sobre el estado físico de Navarro la resolvió él mismo con un partidazo de esos que hacía tiempo que no se le veían. El escolta, tocado en un tobillo tras el choque frente al Caja Laboral, terminó el partido con 21 puntos (4 triples) y 3 asistencias, rompiendo una vez más los esquemas defensivos que Messina utilizó para frenarle.

A Pascual le funcionó su mejor arma: la defensa. Su equipo, el más efectivo de la Euroliga en esa parcela, volvió a limitar los puntos de su rival, al que dejó en solo 25 en los dos últimos cuartos. Fue ahí donde se fraguó el triunfo azulgrana. La salida del Barcelona Regal tras el descanso fue brutal , con un parcial de 12-1 que encendió las alarmas en Moscú. Huertas y Navarro lideraron la revolución, que tuvo en Víctor Sada al mejor aliado defensivo. Encomiable su tarea para frenar a Teodosic, el mejor junto a Krstic en el conjunto ruso.

Con Sonny Weems apagado y sin la aportación de Aaron Jackson , el Barcelona campó a sus anchas. La zona fue coto cerrado de Jawai y Lorbek y a pesar de los esfuerzos de Messina desde el banquillo. La victoria final deja al Barcelona como único invicto y líder del grupo, pero lo que es más importante es el mensaje de autoridad que lanza a sus rivales.