Deportivos de la policía, espectáculo y servicio

¿Un Porsche 911 con sirenas? ¿Un Lamborghini Gallardo de la policía italiana? ¿Un Lotus de los Carabinieri? Pues no son ilusión, sino una realidad tangible en países de nuestro entorno, como Alemania, Austria, Italia o Reino Unido, si ir más lejos. Incluso en la vecina Portugal hay alguna unidad de la Guardia Nacional Republicana, equivalente a la Guardia Civil, de Subaru Impreza STI, otra máquina de carreras. Al otro lado del océano, en Estados Unidos, más de lo mismo, con ejemplos tan contundentes como el Chevrolet Corvette o el Dodge Charger SRT8, por no hablar de la propuesta de Hummer H-2 que, junto a otras, se puede ver pinchando aquí. Por cierto, el más espectacular de todos es una variante del Caparo T-1 (en la galería sobre estas líneas), una broma del popular programa televisivo de automovilismo Top Gear que, en su debut, dejó a más de uno con la boca abierta.

¿Para qué se usan?

Hay modelos de todo tipo. Algunas son meras demostraciones, incluso de firmas preparadoras de tuning. Ferrari, al hilo de su 60 aniversario, decoró de forma provisional una unidad de 612 Scaglietti que acompañó a una caravana de sus modelos en un tour demostrativo por diversos países europeos. Pero en general son automóviles destinados a la vigilancia de autovías y autopistas, capacitados, como cabe imaginar, para interceptar evasiones a gran velocidad. En algunos casos, también se utilizan para rescate como vehículos de intervención rapida.

¿Qué ejemplos y modelos existen?

Los hay de todo tipo, en general grandes súper deportivos como el descapotable holandés Spyker C-8, el japonés Nissan GT-R (en Dubai) o el Lamborghini Diablo. La Polizia italiana cuenta con varias unidades del Lamborghini Gallardo LP 560-4 destinadas, sobre todo, al servicio de rescate en carretera. De hecho, cuentan con un pequeño equipo medicalizado, incluso con desfibrilador integrado. Sin salir del país transalpino, el cuerpo de Carabinieri suma, desde hace poco, un llamativo Lotus Evora S que luce, claro está, la correspondiente librea marino, rojo y blanco, junto a los dispositivos luminosos y acústicos reglamentarios.

Con una tradición similar, la policía alemana de carreteras disfruta de distintas posibilidades, como BMW de altas cilindrada y potencia, pero sobre todo con rabiosos Porsche 911. En sucesivas ediciones, este codiciado modelo de motor y tracción traseros, que también figura en el inventario de las policías austriaca y belga, está al servicio de este cuerpo desde hace casi cuarenta años en versión 2.4 de 190 CV (hoy alrededor de 400) capacitados para alcanzar 220 km/h, muchos en la época, hasta para los delincuentes más avezados y escurridizos huyendo al volante de monturas similares. Hubo unidades 911 Targa, con techo desmontable, aunque el tiempo y el uso demostró que no resultaban prácticas en países donde llueve con asiduidad.

¿Quién los conduce?

La Polizia italiana, por ejemplo, explica que el cuadro de agentes adscrito a este servicio, de por sí seleccionado de entre los mejores conductores de la plantilla, recibe una formación específica a cargo, entre otros, de especialistas y ex pilotos en nómina de marcas como Lamborghini.

¿Y se accidentan?

Como vehículos de interceptación, a menudo destinados a neutralizar evasiones, son sensibles a la siniestralidad. En cualquier buscador de Internet es fácil encontrar imágenes de un Gallardo que terminó una persecución de forma, digamos, «aparatosa». No es el único ni será el último...