Porta, un producto de internet a golpe de rap

POR IGNACIO SERRANOMADRID. Christian Jiménez siempre ha sido un chaval muy normal, de los que se pasa las tardes jugando al «Pro» (el juego de fútbol de la Playstation) y dando vueltas por el barrio

09/02/2008 a las 02:44h.

POR IGNACIO SERRANO

MADRID. Christian Jiménez siempre ha sido un chaval muy normal, de los que se pasa las tardes jugando al «Pro» (el juego de fútbol de la Playstation) y dando vueltas por el barrio con los colegas. Pero una pasión precoz y una mente despierta le han abierto las puertas del éxito en el mundo del espectáculo. «¿Crees que salí de la nada?/Yo escribía rap en el patio cuando los demás niños jugaban», dice una de sus rimas. «Es cierto», asegura Porta, su nombre de guerra en el rollo del hip-hop.

«Empecé a escribir rimas a los nueve años, y con doce grabé mis primeras canciones con un plato de veinte euros, así que imagínate como era». Con el tiempo fue mejorando su «flow», y sus maquetas, dominadas por temáticas decididamente adolescentes, empezaron a hacer furor en su grupo de amigos. «Dragonball rap», «Tetris rap»..., fueron de mano en mano hasta que uno de sus camaradas le dijo: «Oye tío, ésto está muy guapo, ¿por qué no lo colgamos en internet?». Porta le miró y simplemente dijo: «Venga».

«Cuando al día siguiente me levanté y vi que había casi 10.000 descargas me quedé loco. Ahí estaba yo, con la boca abierta, imaginándome a 10.000 personas en fila, y pensando: ¡Jóder, cuánta gente!». Cuando, en cuestión de semanas, las visitas dejaron de contarse por miles, recibió una llamada de teléfono. «Hemos visto los millones de descargas en tu Myspace, y nos gusta lo que haces». «Fueron varios los sellos que me tantearon, pero me decidí por Universal», dice Porta, todavía alucinado con el fulminante despegue de su carrera, que casi no le ha dejado tiempo para abrocharse el cinturón. «De momento estoy muy contento con cómo me está tratando la industria, ya veremos qué pasa cuando salga el disco», asegura.

«En boca de tantos»

Su ansiado primer álbum, «En boca de tantos», es un paseo por los parques de las grandes ciudades, por los corrillos de chavales «fumando peta-zetas», por las maravillosas preocupaciones pre-adultas. «Es el título de una de las canciones, en la que respondo a las críticas y a las chorradas que se han dicho sobre mí en los foros. Todo para darle la vuelta a la tortilla, porque soy un producto de internet y sé que se están metiendo con un personaje. Cuando empiezas pueden sentar mal, pero luego te lo tomas a risa y casi te animan a seguir más que a otra cosa». Algunos cibernautas le acusaban de «toyaco», lo peor que te pueden llamar en el mundo del hip-hop -del inglés «toy», ser un juguete, no ser real-.

Canciones de amor

«No entiendo cómo se puede decir eso de alguien a quien no conoces. Es como las batallas de gallos patrocinadas, eso de coger a un tío del que no sabes nada y decirle: «Hey tío, me acuesto con tu hermana», y que la gente te aplauda, pues no lo veo. Eso se hace en la calle, con tus colegas. Aunque he de reconocer que es algo divertido», afirma entre risas.

Muchas de las críticas van dirigidas a sus sorprendentes canciones de amor, llenas de un romanticismo fronterizo -pero sin cruzar la línea- con lo cursi poco habitual en el rap. «Sabía que algunos raperos me crucificarían por hacer temas de amor, pero si estoy aquí es precisamente por no tener pelos en la lengua, siempre he contado las cosas como las he sentido», asegura.

«En boca de tantos» llegará a las tiendas el 19 de febrero «con el mismo espíritu de las maquetas, pero con una temática más variada y una producción increíble», y a juzgar por el ingente número de foreros sudamericanos que afirman que Porta «es el mejor MC de España», podría ser exportado en no mucho tiempo.

Él, mientras tanto, arrasa en los locales de Barcelona, ocupa portadas de revistas, vive el momento y se olvida de hincar codos. «Cuando la cosa esté más relajada estudiaré psicología, o psiquiatría, o imagen y sonido, o...». Lo dicho, normal hasta la médula.