«Han traído a mi Antonio en una caja como a un perro»

«Por fin, tras una espera de seis días, ayer pudimos despedir a mi hermano Antonio. La repatriación de su cadáver no fue una tortura sólo por la espera sino también por la forma de gestionarla ». Es el comienzo del último mensaje publicado hoy mismo en su blog por Javier Cejudo , hermano del policía fallecido en Yemen la semana pasada. Después de una larga y tensa espera, la familia recibió otro mazazo, el penúltimo cuando llegó el cuerpo del agente al aeropuerto de Valencia el domingo. «Han traído a mi Antonio en una caja como a un perro», clamaba su madre llena de rabia y dolor.

«No es una caja o embalaje, es el ataúd de Antonio. Mi madre se quería morir», escribió su hermano Javier. Los policías que recibieron el féretro de su compañero, miembro de la UIP y destinado en la seguridad de la Embajada de España en Yemen , tampoco salían de su asombro y la voz de lo que había ocurrido se fue corriendo. En casos de muerte como la de este agente lo habitual es que Muface (la mutua de los funcionarios) envíe un ataúd desde España, algo que tampoco ocurrió.

Los familiares de Antonio Cejudo aún no tienen confirmación oficial ni informe de autopsia sobre las causas de la muerte. El cuerpo fue hallado con el arma al lado, pero desconocen qué pruebas se han realizado para determinar cómo ocurrió, fijar las horas, etc. Por estos motivos, han enviado un comunicado en el que manifiestan el «tremendo malestar por el ataúd usado». «Parecía una caja para transportar mercancías», se lamentan y piden al ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García Margallo , unas disculpas públicas y que se depuren responsabilidades por la gestión de la repatriación. «Ningún ciudadano español se merece este trato, especialmente cuando trabaja al servicio del Estado».

Para reforzar su petición, han solicitado apoyo a todos los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad a los que invitan a concentrarse 5 minutos a las puertas de sus centros de trabajo el próximo jueves 31 de mayo a las 12:00, junto al resto de ciudadanos.

Además, solicitan al subdelegado del Gobierno en Alicante, Alberto Martínez Díaz , que sí acudió al tanatorio y al funeral que traslade el malestar de la familia al Gobierno.

El Sindicato Unificado de Policía (SUP) también tiene previsto pedir responsabilidades por el trato dispensado a Cejudo, «un policía muerto al servicio del Estado en un país extranjero» aunque aún no se ha decidido si se dirigirán al Ministerio del Interior, a los grupos parlamentarios e incluso a la vía judicial.