Nuevas versiones Audi clean diesel
El fabricante de los aros amplía su tecnología diesel más limpia a su modelo insignia A8, lo que le permite superar la norma de emisiones EU6 de aplicación a partir de 2014.
madrid Actualizado: GuardarAudi puso por primera vez a disposición de sus clientes la tecnología diesel más limpia del mundo en 2009, en el SUV Q7, que estrenaba un sistema de tratamiento de los gases de escape en el motor 3.0 TDI capaz de reducir drásticamente las emisiones de óxidos de nitrógeno, adelantándose en 5 años a la entrada en vigor de la normativa de emisiones EU6, obligatoria para nuevos modelos a partir del año 2014.
Posteriormente, la tecnología clean diesel llegó al A4 y seguidamente a los A6 (en versiones de carrocería berlina, Avant y allroad) y A7 Sportback. A ahora, con la introducción de las nuevas versiones clean diesel para el Audi A8, la marca de los cuatro aros se convierte en el fabricante con mayor número de modelos diesel a la venta capaces de superar la futura normativa que reduce las emisiones de hidrocarburos y óxidos de nitrógeno (HC+NOx) de los 0,23 g/km que establece la actual EU5 hasta los 0,170 g/km de la futura EU6.
Clean diesel: mismas prestaciones, menos emisiones
Las nuevas versiones, realizadas sobre la base del motor 3.0 TDI, introducen mejoras para reducir las emisiones nocivas de óxidos de nitrógeno e hidrocarburos sin quemar. En una primera fase, estas mejoras modifican la recirculación de gases de escape, adoptan regulación integral de la presión en los cilindros y optimizan la sobrealimentación. Pero el protagonista absoluto es un catalizador específico y un aditivo para la depuración de gases denominado AdBlue. No se modifican potencia, prestaciones o consumos, que incluso mejora en algunas versiones.
Adicionalmente al catalizador de oxidación y al filtro de partículas diesel que incorporan los motores TDI de Audi, el 3.0 TDI clean diesel añade un catalizador SCR especial para neutralizar óxidos de nitrógeno. Para ello, se inyecta en los gases de escape, justo antes de su entrada a ese catalizador especial, un aditivo acuoso llamado AdBlue que, en contacto con los gases de escape a elevada temperatura, se transforma en amoniaco, produciéndose una reacción química que disgrega los óxidos de nitrógeno en nitrógeno y agua. El AdBlue es un agente reductor biodegradable inofensivo, consistente en una solución al 32,5%de urea y agua; no es tóxico ni inflamable.
El aditivo AdBlue se almacena en uno o 2 depósitos (según modelos) de unos 23 litros totales adicionales al convencional de combustible, que no ve alterada su capacidad. Su repostaje se realiza en una toma y un manguito adicionales junto a la boca de llenado para el depósito de combustible del motor.
Los depósitos de AdBlue se cargan en el servicio oficial coincidiendo con las operaciones de mantenimiento programadas. Cuando la cantidad de AdBlue desciende por debajo de un nivel específico, el conductor recibe una serie de avisos en el cuadro de instrumentos, con una primera indicación cuando queda agente reductor para 2.400 km. En caso necesario, el propio usuario puede utilizar envases de repostaje de 1,9 litros disponibles en concesionarios Audi o en gasolineras correspondientemente identificada¿ para añadir AdBlue mediante un adaptador específico.
El último en sumarse a esta tecnología es el A8 3.0 TDI clean diesel quattro, alternativa al motor de más volumen en el mercado español en la gama A8, el 3.0 TDI de 250 CV en versiones de carrocería normal y alargada A8 L.
Junto al A8 3.0 TDI clean diesel quattro tiptronic, Audi ofrece clean diesel 3.0 TDI en los A4 berlina y Avant; A6 berlina, A6 Avant y A6 allroad quattro; en el A7 Sportback; y en el SUV Q7. Salvo en el A8, en el resto rinde 245 CV. Siempre se asocia a la tracción integral quattro, con cambio auto secuencial multitronic de 8 velocidades para los A8 y Q7 y con caja S tronic de 7 marchas en el resto. El sobreprecio de las versiones clean diesel es de 1.500 euros, aproximadamente.
