Diez «bichos» peligrosos que conviene evitar durante las vacaciones... Y siempre
El polvo de este escarabajo, llamado mosca española, es una «viagra natural». Por desgracia, también es letal - Siga
animales terribles

Diez «bichos» peligrosos que conviene evitar durante las vacaciones... Y siempre

Terroríficos, letales o simplemente repugnantes. En las profundidades marinas o en el retrete de tu casa, hay medusas mortíferas, caracolas lanza puñales, ranitas asesinas y arañas violinistas

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Terroríficos, letales o simplemente repugnantes. En las profundidades marinas o en el retrete de tu casa, hay medusas mortíferas, caracolas lanza puñales, ranitas asesinas y arañas violinistas

12345678910
  1. Peligrosidad 5/10: el escarabajo afrodisiaco

    El polvo de este escarabajo, llamado mosca española, es una «viagra natural». Por desgracia, también es letal
    El polvo de este escarabajo, llamado mosca española, es una «viagra natural». Por desgracia, también es letal - Siga

    Reptan por el suelo, se esconden detrás de los muebles, rozan los pies de los nadadores y acechan a sus víctimas en medio de la oscuridad. Entre el millón y medio de especies de animales que se han catalogado (y sin contar con las que están por descubrir), hay un buen puñado de «bichos» desagradables que pueden morder, picar, arañar, parasitar, devorar, aplastar, electrocutar o envenenar al viajero desprevenido. O al desprevenido a secas.

    Por eso, Isidoro Merino ha publicado « 1.000 maneras estúpidas de morir por culpa de un animal» en la editorial Planeta. Después de nadar con leones marinos en las islas Galápagos, y de ser atacado por un gorila macho en los volcanes del Congo, tal como reza la sobrecubierta, este periodista de viajes ha recopilado una amplia colección de animales letales, peligrosos o simplemente repugnantes, para deleite del lector inquieto... y poco aprensivo.

    Con el permiso de los felinos, osos, cocodrilos, tiburones, serpientes y arañas, aquí os mostramos algunos de los «bichos» más peligrosos... Y curiosos.

    El escarabajo favorito del Marqués de Sade

    La cantárida o mosca española puede presumir de haber matado a un rey. Y acabó ni más ni menos que con uno de los Reyes Católicos.

    El rey Fernando II de Aragón tenía 53 años cuando se casó con una joven de 18, Germana de Foix. Había pasado un año después de la muerte de su esposa, Isabel la Católica, y faltaban 492 años para que se patensase la Viagra. Pero el monarca quería tener descendencia de su joven esposa, así que decidió probar el polvo de la cantárida, por sus supuestos efectos afrodisiacos. Y porque en pequeñas dosis provoca erecciones espontáneas.

    Pero tal como decía Paracelso, «el veneno está en la dosis», y un exceso de este remedio puede ser peor que la enfermedad. De hecho, un miligramo de esta sustancia puede matar a una persona.

    A pesar de los accidentes, una sustancia que los insectos usan para defenderse, se puso de moda como afrodisiaco en la Francia del siglo XVIII. Incluso el mismísimo Marqués de Sade usó en alguna de sus fiestas los llamados «caramelos Richelieu».

  2. Peligrosidad 10/10: el ser vivo más venenoso de la Tierra

    Rozarla es morirse de dolor. El que soporte la sensación tendrá que resistir el paro cardiaco
    Rozarla es morirse de dolor. El que soporte la sensación tendrá que resistir el paro cardiaco - Guido Gautsch

    Se puede decir que tienen el aspecto de una pequeña cajita transparente y viscosa, pero lo cierto es que son casi invisibles en el agua. Las medusas cofre o avispas de mar, de nombre científico Chironex fleckeri, pertenecen al grupo de las cubomedusas y tienen el honor de ser el animal más venenoso sobre la Tierra.

    Su cuerpo mide hasta 20 centímetros, pero tienen tentáculos que pueden llegar a medir 3 metros. Todos ellos están repletos de cnidocitos, un tipo de célula provisto de un arpón que se dispara al más mínimo roce y que inyecta en la víctima «una carga mortífera que liquidaría al equivalente a una habitación llena de gente».

    Son muy abundantes en la coste noreste de Australia entre los meses de octubre y mayo. Los nadadores que ignoren los carteles de advertencia y que tengan la mala suerte de rozar a uno de estos animales sufrirán «un súbito e indescriptible dolor, tan intenso que puede inducir un shock y hacer que la víctima se ahogue». El veneno (neurotóxico, cardiotóxico y citotóxico) puede provocar instantes después el fallo respiratorio y el colapso cardiovascular.

  3. Peligrosidad 8/10: los dragones tragones

    Tiene una boca en consonancia con sus 150 kilogramos de peso y bacterias suficientes para provocar graves infecciones
    Tiene una boca en consonancia con sus 150 kilogramos de peso y bacterias suficientes para provocar graves infecciones - Adhi Rachdian

    Los dragones de Komodo son lagartos gigantes que pueden medir más de tres metros y pesar hasta ciento cincuenta kilogramos. Cuando no están tomando el sol en alguna de las cuatro islas de Indonesia donde viven, acechan y cazan a sus presas en grupo o devoran la carroña que encuentran. Tienen unas mandíbulas muy poderosas y armadas con dientes serrados, como los tiburones, y son capaces de rastrear el aroma de las víctimas con su lengua bífida.

    Y no tienen buenos modales a la hora de sentarse a la mesa. Pueden engullir en un solo banquete hasta el 80 por ciento de su peso y al final regurgitan una bola maloliente de pelos, cuernos, dientes o zapatos. Tienen la costumbre de arrancar grandes pedazos de carne y hacer volar los intestinos de sus presas antes de masticarlos. Y no usan cubiertos.

    Desde que fueron descubiertos en el año 1911, se han documentado tres ataques mortales. El exmarido de Sharon Stone estuvo a punto de perder el dedo gordo de un pie al entrar en una jaula de dragones en el zoo de Los Ángeles. Despues de enmendarle la herida, tuviero que atiborrarle de antibióticos. Y es que en la boca de estos lagartos hay un peligroso cóctel de bacterias que, aparte de provocarles mal aliento, puede matar a las víctimas por infección de la sangre (septicemia).

  4. Peligrosidad 7/10: la asesina del váter

    La araña violinista vive en los retretes poco higiénicos. Limpiar puede ser una cuestión de supervivencia - Philipe de Liz Pereira

    Las arañas violinistas o arañas de los rincones (género Loxosceles) tienen predilección por los rincones oscuros y tienen la peculiar costumbre de vivir en los aseos con poca higiene, donde abundan los insectos que les sirven de alimento. Suelen picar en nalgas, muslos y zonas colindantes e inyectan un veneno citotóxico y hemolítico que provoca necrosis y úlceras gangrenosas de hasta 20 centímetros.

    Las más dañinas son las especies americanas, pero en España también hay una especie (Loxosceles rufescens) con hábitos desagradables. Las picaduras más severas pueden provocar hemorragias internas y en un 13 por ciento de los casos provocan la muerte de la víctima, generalmente, en el caso de ancianos y niños.

  5. Peligrosidad 9/10: una linda ranita

    Las ranas de los géneros Dendrobates y Phyllobates van vestidas de fiesta. Y todas ellas son muy, pero que muy venenosas
    Las ranas de los géneros Dendrobates y Phyllobates van vestidas de fiesta. Y todas ellas son muy, pero que muy venenosas - H. Krisp

    ¡Ojo! ¡Cuidado conmigo! ¡Soy peligroso! Eso es lo que los colores chillones de la rana dardo azul gritan a los cuatro vientos, en los bosques más espesos de Centro y Sudamérica. En una «táctica» conocida como aposematismo, animales que en vez de querer pasar desapercibidos, parecen intentar destacar en medio del entorno. ¿Por qué? Al ser tan chillones son muy visibles y si sobreviven, el resto de animales sabe que solo puede ser por una cosa: porque son muy venenosos.

    El cuerpo de una de estas ranas, la rana dardo dorada, tiene veneno como para matar a 10 hombres o 20.000 ratones. Para probar los efectos neurotóxicos e inmediatos de esta ranita, solo hace falta rozarla. Por eso no extraña que los indios emberá de Colombia la usaran para envenenar sus armas de caza.

  6. Peligrosidad 10/10: la sonrisa de la muerte

    La mamba negra es muy rápida, agresiva y... terriblemente venenosa
    La mamba negra es muy rápida, agresiva y... terriblemente venenosa - Bill Love

    Hay sonrisas que matan. Si una serpiente te mira, abre la boca y tiene el paladar negro, más te vale esfumarte. Estás ante la mamba negra, la serpiente más temida de África. Cuando está erguida puede lanzar un mordisco a una velocidad de 25 kilómetros por hora y solo 10 miligramos de su veneno sirven para matar a un hombre. Para asegurarse de que hace blanco en su presa, suele lanzar ráfagas de mordiscos en los que inyecta hasta 100 miligramos de veneno neurotóxico.

    Se trata de una criatura veloz, inquieta y letalmente venenosa (la mortalidad es del 100 por cien si no se administra un antídoto) cuyos poderes son reflejados en las leyendas africanas. Aparte de la mamba negra, que es de color oliváceo, hay tres especies más de mambas verdes que viven en los árboles y que se confunden de fábula con las ramas y las hojas. Así que cuidado con donde ponéis las manos.

  7. Peligrosidad 5/10: el ejército del terror

    Las marabunta son legión, no se detienen y arrasan la vida animal que se encuentran a su paso
    Las marabunta son legión, no se detienen y arrasan la vida animal que se encuentran a su paso - April Nobile

    No rugen, pero se las oye llegar por el estrépito de animales que huyen antes de que lleguen. Cuando la hormiga legionaria o marabunta avanza, no hay nada que la detenga. Forman ejércitos de más de un millón de efectivos y avanzan en un frente de varias decenas de metros para atacar toda la vida animal que se encuentran a su paso.

    «Solo el que ha podido contemplarlas en acción sabe que el más poderoso e implacable cazador de los trópicos americanos es un ser ciego y dimimuto, que se mueve entre la hojarasca en hordas compuestas por cientos de miles de individuos, sembrando a su paso el terror y la muerte. Un ser que no tiene morada fija, que vivaquea cada noche en un lugar distinto y que solo se detiene el tiempo justo para realizar la puesta y para que nazcan sus hijos», escribía Félix Rodríguez de la Fuente.

    Hay casos registrados de hombres o caballos heridos que han sido devorados por estas hormigas. Puedes encontrarlas en África y Sudamérica, así que cuidado al hacer un picnic y tirar miguitas de pan al suelo.

  8. Peligrosidad 5/10: el avestruz «velociraptor»

    El casuario es como una gallina de 85 kilogramos. Puede pegar patadas capaces de matar a una persona
    El casuario es como una gallina de 85 kilogramos. Puede pegar patadas capaces de matar a una persona - Matt Trollen

    Los pajaritos suelen ser inofensivos. Pero cualquiera que se meta con un casuario se puede llevar una patada y un profundo corte. En el sentido literal del término. Se trata de una robusta ave que vive en Australia y Nueva Guinea, que puede pesar 85 kilogramos y alcanzar la altura de un hombre. Tienen una fuerza extraordinaria y son muy belicosos cuando se ven acosados. Lanzan rápidas patadas y tienen unas uñas tan duras y cortantes como dagas que pueden darte un buen susto. Por ejemplo, en 1926, un muchacho de 16 años murió cuando un casuario le cortó la carótida.

    Son parientes del ya extinto moa gigante, que medía tres metros de altura y pesaba 250 kilogramos.

  9. Peligrosidad 9/10: el caracol asesino

    Los conos lanzan una especie de arpón venenoso que puede matar a una persona
    Los conos lanzan una especie de arpón venenoso que puede matar a una persona - David Burdick

    Nunca te metas con el caracol equivocado. En las aguas someras y en las playas del Índico y del Pacífico puedes toparte con un caracol marino del género Conus. Tienen una concha muy bonita, de entre 5 a 15 centímetros, y no son muy rápidos. Pero algunos de ellos son capaces de lanzar un dardo venenoso que puede traspasar la ropa o el neopreno de un traje de buzo.

    Todas las especies de conos son depredadoras. Se alimentan de moluscos y pequeños peces e inyectan su veneno para paralizar a sus presas. Para ello, usan su rádula, una especie de lengua dura y rasposa que funciona como un arpón para inyectar las neurotoxinas. Y lo que es mejor, o peor, según se mire, el veneno va provisto de un potente analgésico. Así que ni te darás cuenta del «pinchacito».

    Algunas especies, como el Conus striatus en Australia, son muy combativas. Hay bañistas que cuentan que estos caracoles les persiguieron por la arena de la playa.

  10. Peligrosidad 7/10: una de chopitos, por favor

    Los calamares gigantes de Humboldt llevan hacia el fondo a grandes peces. Son muy agresivos y temidos por los pescadores mexicanos
    Los calamares gigantes de Humboldt llevan hacia el fondo a grandes peces. Son muy agresivos y temidos por los pescadores mexicanos - Fish guy

    Los calamares rebozados entran muy bien con un poquito de limón en una terracita de verano. Pero no todos son tan agradables. El calamar gigante de Humboldt, jibia gigante o potón del Pacífico es el «primo de Zumosol» de los calamares. «Los diablos rojos» pueden llegar a medir lo mismo que un hombre y son capaces de atrapar con sus ventosas dentadas a animales tan grandes como atunes y tiburones.

    Los pescadores mexicanos los temen más que a los tiburones. Aunque nunca ha habido ninguna muerte relacionada con estos animales, en ocasiones han atacado a los submarinistas arrancándoles las gafas de bucear e intentando arrastrarlos hasta el fondo. Se cree que son muy inteligentes, pero también son muy agresivos y devoran todo lo que se encuentran a su paso. Son capaces de seguir atacando incluso después de perder la cabeza.

Ver los comentarios