La relación de amistad entre el pintor sevillano Bartolomé Esteban Murillo y el canónigo de la Catedral de Sevilla Justino de Neve queda patente en la exposición presentada hoy en el Hospital de los Venerables. El Museo del Prado, la Fundación Focus-Abengoa y la Dulwich Picture Gallery de Londres reúnen en la muestra «Murillo y Justino de Neve. El arte de la amistad», cerca de veinte obras del gran pintor sevillano, relacionadas con el importante mecenas del barroco Justino.
La muestra se presentará en primer lugar en Madrid, en el Museo del Prado, del 26 de junio al 30 de septiembre, para viajar posteriormente a Sevilla, en concreto al Hospital de los Venerables, donde podrá ser visitada desde el 11 de octubre al 20 de enero. Finalmente, la exposición también tendrá su cita en Londres, en la Dulwich Picture Gallery, de febrero a mayo del próximo año.
Anabel Morillo, directora general de la Fundación Focus-Abengoa, explicó que «será una ocasión única e inédita para la ciudad de Sevilla, ya que reúnen estas obras por primera vez desde que el expolio napoleónico las dispersara por el mundo». La vuelta de estas pinturas a su ciudad de origen, lleva a algunas obras incluso a regresar a su lugar de exposición original. Es el caso de la famosa Inmaculada Concepción de los Venerables, que será exhibida en el marco original que aún se conserva en uno de los altares de la iglesia del Hospital de los Venerables Sacerdotes.
«Las investigaciones iniciadas para esta muestra ha dado mucha información nueva sobre estos dos rostros del barroco sevillano, información que se mostrará en los folletos», informó Gabriele Finaldi, director adjunto de Conservación e Investigación del Museo del Prado. La exposición estará organizada en varios apartados: el Autorretrato del pintor junto otro de su amigo y mecenas; obras concebidas para la iglesia de Santa María la Blanca de Sevilla, con la que Murillo tenía una especial relación; obras hechas para la Catedral de Sevilla y el Hospital de los Venerables Sacerdotes; y pinturas realizadas para la colección privada de Justino de Neves. «Cinco obras han sido especialmente restauradas por el Museo del Prado», comentó Gabriele Finaldi.
Asímismo Xavier Bray, director de Conservación de la Dulwich Picture Gallery, confesó en la presentación que «en la primavera del año que viene Londres va a ser un festival de Murillo», y explicó los esfuerzos que hará la galería para que las obras se expongan con una distribución que recuerde a las iglesias sevillanas, «algo muy atractivo para nuestro público».
En otoño, los sevillanos podrán disfrutar de obras como los grandes lunetos de la Fundación de Santa María la Mayor, las alegorías de La Primavera y El verano, o la pinturas de temática religiosa sobre obsidiana.
