Chevrolet Camaro, el renacimiento
Después de 40 años en la brecha, la firma amerciana saca al mercado una nueva edición del Camaro, un legendario deportivo que sigue fieal a su genuina filosofía «muscle car» importada al siglo XXI y con tecnología al gusto europeo. Disponible en cupé y descapotable Convertible, parte de 43.900 euros.
suiza Actualizado: GuardarEl nuevo Camaro (4,84 metros de longitud, 1,92 de anchura y sólo 1,36 metros de altura) representa el purismo deportivo americano. En su última generación, ya a la venta en España, muestra un diseño contemporáneo y una imagen que queda grabada en la retina, con una cintura alta, llantas de 20 pulgadas, frontal en V y una pequeña superficie acristalada, y una impronta fuerte, musculosa y deportiva. El coche se ofrece en carrocerías coupé (maletero de 384 litros) y descapotable Convertible (maletero de 287 a 328 litros, según la posición de la capota, motorizada y textil), siempre con cuatro plazas perfectamente utilizables.
Para Europa, su chasis ha sido calibrado en el famoso circuito germano de Nürburgring Nordschleife.
Aporta una suspensión totalmente nueva (McPherson delatero y paralelogramo deformable trasero) que consigue mayor rigidez y estabilidad lateral, lo que mejora las prestaciones y la conducción a alta velocidad y en terreno virado, sin disminución del confort. Esta suspensión ha tenido tal aceptación que en Estados Unidos se ofrece como equipamiento opcional en las versiones más deportivas.
El interior presume de un austero lujo con diseño retro y gran confort a partir de buenos materiales rematados notablemente. La instrumentación exhibe dos grandes esferas con 2 indicadores, temperatura y combustible, complementados por cuatro relojes instalados en la consola central, frente al selector del cambio; dispone de computadora de a bordo y proyección de datos sobre el parabrisas (Head-up display). Los asientos, de tipo deportivo, son cómodos y ofrecen mucha sujeción, lo que permite una circulación agradable durante recorridos de autopista o carretera de montaña.
A España llega con motor de gasolina aspirado 6.2 V8 de 6,2 de 432 CV (de 43.900 a 45.900 euros el Coupé, y de 49.900 a 51.900 euros el Convertible) con caja manual y con 405 CV si opta por la alternativa automática (ambas de seis relaciones), la primera con 569 Nm y la segunda con 556. Fabricado en aluminio con camisas de hierro fundido y árboles de levas en cabeza, el automático añade además gestión de motor Active Fuel Management, que desconecta una bancada de cilindros funcionando sólo con cuatro si las condiciones de carga lo permiten. También hay sincronización de válvulas VVT, que como el anterior disminuye el consumo. Los consumos quedan entre 13,1 y 14 l/100 km, que no parecen excesivos para el tipo de motor y vehículo de que se trata.
El estabilizador Stabilitrack, con cuatro modos de trabajo, forma parte de la dotación de serie de un modelo que ABC Motor ha podido conducir por carreteras de Los Alpes y autopistas. Al respecto, resulta agradable y muy confortable. Se aprecia el trabajo realizado en las suspensiones, pues no balancea y vira bastante plano, transmitiendo seguridad (monta frenos Brembo, delante con pinzas de cuatro pistones) y dinamismo; la dirección es de asistencia hidráulica. Espectacular el bramido del V8, grave y potente sin resultar molesto, muy llamativo en ciudad. Por cierto, ofrece versiones especiales como la llamada Edición Limitada 45 Aniversario, con decoración y color Negro Flash específico.

