Mazda CX-5, desde 24.790 euros
No sólo recupera la presencia de la firma nipona en el pujante segmento de los SUV medios, sino que estrena la inteligente y eficiente filosofía mecánica Skyactive que la compañía introducirá progresivamente en toda su gama de modelos. Ya está a la venta con tracción delantera y total, en diésel y gasolina, con cambios manual y auto secuencial.
madrid Actualizado: GuardarRival natural de los Citroën C4 Aircross, KIA Sportage, Hyundai ix35, MINI Countryman, Mitsubishi ASX, Nissan Qashqai, Opel Antara, Peugeot 4008, Renault Koleos, o Volkswagen Tiguan, entre otros, el nuevo Mazda CX-5 se incorpora a la oferta todocamino de la marca japonesa, que ya contaba con el CX-7 y, en algunos mercados, con una variante alargada de éste conocida como CX-9.
El CX-5 es un todocamino medio, pero no es el primero de la firma nipona, pues en el pasado ya contó con el Tribute, clónico del Ford Escape de la época. En todo caso, el CX-5 es un desarrollo nacido de cero, caracterizado por un dinámico (0,33 Cx) y moderno diseño (conforme al nuevo lenguaje KODO, o movimiento en japonés, de la marca), que se beneficia de muchas de las nociones técnicas Skyactive Technology
recientemente estrenadas.
Con una longitud externa de 4,55 metros, su espaciosidad es notable, hasta el punto que la habitabilidad en las plazas traseras viene a ser la de su hermano grande, el citado CX-7. Además, cuenta con un maletero básico de 500 litros (sumado el doble fondo bajo el piso principal, pues sin él queda en 463), ampliable hasta 1.620 abatiendo los asientos traseros partidos de serie en porciones 40/20/40; el depósito de carburante admite 58 litros.
Como sucede en modelos equiparables, no está concebido para la práctica del todoterreno puro (lo suyo son, en realidad, las pistas), si bien muestra unas aceptables cotas camperas: aproximación de 18,6 grados, salida de 24,4 y altura libre hasta el suelo de 21 cm.
Por motores, el CX-5 cuenta con alternativas de gasolina y de gasóleo. Hablando del primer apartado, se centra en el bloque aspirado (sin turbo) 2.0 de inyección directa y 160/208 Nm (200 km/h, 9,2 segundos y 6 l/100 km de promedio oficial, con 139 g/km), o 165 CV/210 Nm (197 km/h, 10,5 segundos en el 0 a 100 km/h y 6,6 l/100 km de promedio, con 155 g/km), según el tipo de tracción, que puede ser delantera 2WD o total 4WD. En diésel, siempre turbo y de inyección directa common rail (con una baja relación de compresión de 14:1, la misma que el motor de gasolina, en este caso elevada), las opciones parten de un mismo bloque 2.2 tretracilíndrico que libera 150 CV/380 Nm (202 km/h, 9,2 segundos de 0 a 100 km/h y 4,5 l/100 km, con 119 g/km) o bien 175 CV/420 Nm (204 km/h y 9,4 segundos, con 5,3 l/100 km y 139 g/km) como tope de gama.
Todos cuentan con caja manual de seis velocidades (su guiado es técnico y preciso), salvo el diésel más potente, que sólo la lleva auto secuencial mediante convertidor hidráulico de par, con las mismas marchas; posibilidad que también se ofrece en opción para el resto de propulsores. Por cierto, el chasis adopta dirección electroasistida y suspensiones independientes con una firme pero confortable calibración, muy acertada en todas las variantes.
El CX-5 transmite una positiva sensación de calidad interior, fruto de la aplicación de materiales y ajustes rigurosos, así como de una perfecta sincronización de los órganos mecánicos que neutraliza cualquier movimiento parásito e invita a conducir durante kilómetros. Ofrece un puesto de conducción tipo turismo, y de una dotación de serie muy completa en todas las versiones (hay dos, según motores, Style y Luxury): estabilizador DSC, seis airbag, pantalla de 5,8 pulgadas en el centro de la consola (muestra las indicaciones del navegador TomTom, opcional por 500 euros, del audio o del Bluetooth, entre otros), sistema de frenada automática mediante rádar a menos de 30 km/h… Puede contar con aviso por cambio involuntario de carril LDW, detector de objetos en los ángulos muertos RVMS, cambio automático de alumbrado de cruce a carretera y viceversa, botón de arranque, luces bixenón…
Precios gama CX-5:
Gasolina
Mazda CX-5 2.0 165 CV 2WD Style: 24.790 euros
Mazda CX-5 2.0 160 CV 4WD Style: 27.790 euros
Mazda CX-5 2.0 165 CV 4WD Luxury Aut.: 32.890 euros
Diésel
Mazda CX-5 2.2D 150 CV 2WD Style: 26.990 euros
Mazda CX-5 2.2D 150 CV 2WD Style Aut.: 28.990 euros
Mazda CX-5 2.2D 150 CV 4WD Style: 29.990 euros
Mazda CX-5 2.2D 150 CV 4WD Style Aut.: 31.990 euros
Mazda CX-5 2.2D 150 CV 4WD Luxury: 33.090 euros
Mazda CX-5 2.2D 150 CV 4WD Luxury Aut.: 35.090 euros
Mazda CX-5 2.2D 175 CV 4WD Luxury Aut.: 35.690 euros

